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Génesis 41:55 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008

La gente de Egipto comenzó a sentir el hambre, pues la tierra dejó de producir. Entonces iban donde el faraón a rogarle que les diera alimentos. El faraón los enviaba a José: ―Hagan todo lo que él diga —les decía.

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Biblia Reina Valera 1960

Cuando se sintió el hambre en toda la tierra de Egipto, el pueblo clamó a Faraón por pan. Y dijo Faraón a todos los egipcios: Id a José, y haced lo que él os dijere.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

Con el tiempo, sin embargo, el hambre se extendió por toda la tierra de Egipto también. Cuando la gente reclamó alimento al faraón, él les dijo: «Vayan a ver a José y hagan todo lo que les diga».

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Biblia Católica (Latinoamericana)

Cuando en Egipto se sintió el hambre, el pueblo pidió pan a gritos, y Faraón decía a todos los egipcios: 'Vayan a José y hagan lo que él les diga.

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La Biblia Textual 3a Edicion

Y cuando tuvo hambre toda la tierra de Egipto, el pueblo clamó a Faraón por pan. Y dijo Faraón a todo Egipto: Id a José y haced lo que él os diga.°

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

Cuando el hambre se hizo sentir en todo el país de Egipto y el pueblo clamaba al Faraón pidiendo pan, decía el Faraón a todos los egipcios: 'Id a José, y haced lo que él os diga'.

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

Y cuando se sintió el hambre en toda la tierra de Egipto, el pueblo clamó a Faraón por pan. Y dijo Faraón a todos los egipcios: Id a José, y haced lo que él os dijere.

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Génesis 41:55
13 Tagairtí Cros  

Cuando la escasez fue grande, y el hambre se extendió por la tierra, José abrió los graneros para venderles alimento a los egipcios.


Y como José era el gobernador de todo Egipto y estaba a cargo de la venta del trigo, sus hermanos llegaron y, en señal de respeto, se inclinaron delante de él, hasta tocar el suelo con la frente.


Pero mientras hablaba, una nube resplandeciente los cubrió y una voz dijo desde la nube: «Este es mi Hijo amado; en él me complazco. Obedézcanlo».


y una voz de los cielos dijo: «Este es mi Hijo amado, y en él me complazco».


Su madre dijo a los sirvientes: ―Hagan lo que él les ordene.


Por eso, mi Dios les dará todo lo que necesiten, conforme a las gloriosas riquezas que tiene en Cristo Jesús.


Porque Dios quiso que en el Hijo habitara toda su plenitud.