Bíobla ar líne

Fógraí


An Bíobla ar fad Sean-Tiomna Tiomna Nua




Éxodo 40:6 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008

y coloca el altar para el holocausto frente a la entrada.

Féach an chaibidil
Taispeáin Interlinear Bible

Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

Después pondrás el altar del holocausto delante de la entrada del tabernáculo, del tabernáculo de reunión.

Féach an chaibidil

Biblia Nueva Traducción Viviente

Coloca el altar de las ofrendas quemadas delante de la entrada del tabernáculo.

Féach an chaibidil

Biblia Católica (Latinoamericana)

Colocarás el altar de los holocaustos ante la entrada de la Tienda de las Citas. Pondrás la pila entre la Tienda de las Citas y el Altar y echarás agua en ella.

Féach an chaibidil

La Biblia Textual 3a Edicion

Pondrás el altar del holocausto delante de la entrada del Tabernáculo de la Tienda de Reunión.

Féach an chaibidil

Biblia Serafín de Ausejo 1975

Colocarás el altar de los holocaustos ante la entrada del santuario de la tienda del encuentro.

Féach an chaibidil

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

Y pondrás el altar del holocausto delante de la puerta del tabernáculo, del tabernáculo de la congregación.

Féach an chaibidil
Aistriúcháin eile



Éxodo 40:6
11 Tagairtí Cros  

Luego quitó el altar de bronce que estaba frente al templo del Señor, y lo colocó al lado norte del nuevo altar.


y colocó afuera el altar para los holocaustos, junto a la entrada, y ofreció en él un holocausto y una ofrenda de grano, tal como el Señor le había ordenado.


»Coloca el altar de oro para el incienso frente al cofre. Instala las cortinas a la entrada del santuario,


Pon el lavamanos entre el santuario y el altar, y llénalo de agua.


El hombre dará muerte al animal allí, delante del Señor, y los hijos de Aarón, los sacerdotes, presentarán la sangre delante del Señor y la rociarán alrededor del altar, a la entrada del santuario.


Los que ofician en el santuario no tienen derecho a comer del altar que nosotros tenemos.


Él es el sacrificio que fue ofrecido por nuestros pecados, y no sólo por los nuestros, sino también por los de todo el mundo.