En las cartas se decía que este edicto debía ser proclamado como ley en todas las provincias y debía hacerse conocer a todo el pueblo, para que todos estuvieran preparados para cumplir su deber en el día señalado.
Ester 8:13 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008 Además establecía, que este edicto, que debía ser reconocido en todo lugar como decreto, debía ser proclamado en alta voz delante del pueblo, para que los judíos pudieran prepararse y vencer a sus enemigos. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 La copia del edicto que había de darse por decreto en cada provincia, para que fuese conocido por todos los pueblos, decía que los judíos estuviesen preparados para aquel día, para vengarse de sus enemigos. Biblia Nueva Traducción Viviente En cada provincia debía emitirse una copia de ese decreto como ley y proclamarse a todos los pueblos, para que los judíos estuvieran preparados para vengarse de sus enemigos el día señalado. La Biblia Textual 3a Edicion La copia de la escritura que había de darse como edicto en cada provincia, fue publicada para todos los pueblos, a fin de que en ese día los judíos estuvieran preparados para vengarse de sus enemigos. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Una copia de este escrito debía ser promulgada como ley en cada provincia y dada a conocer a todos los pueblos. Los judíos debían estar preparados en aquel día para vengarse de sus enemigos. Biblia Reina Valera Gómez (2023) La copia de la escritura que había de darse por ordenanza en cada provincia, para que fuese manifiesta a todos los pueblos, decía que los judíos estuviesen apercibidos para aquel día, para vengarse de sus enemigos. |
En las cartas se decía que este edicto debía ser proclamado como ley en todas las provincias y debía hacerse conocer a todo el pueblo, para que todos estuvieran preparados para cumplir su deber en el día señalado.
Los mensajeros, por orden directa del rey, salieron rápidamente montados sobre los veloces caballos del rey. El mismo decreto también fue promulgado en el palacio de Susa.
Tú, pueblo mío, empaparás tus pies en la sangre de tus enemigos; aun los perros al lamerla tendrán su parte.
¿No creen ustedes que Dios hará justicia a los que él ha escogido y que claman a él día y noche? ¿Se tardará él en responderles?
Aquellas personas clamaban a gran voz: «Soberano Señor, santo y verdadero, ¿cuándo vas a juzgar a los habitantes de la tierra y cuándo vas a vengar nuestra muerte?».
Sansón oró al Señor y le dijo: «Oh Señor Dios, acuérdate de mí nuevamente, dame fuerzas sólo una vez más, para vengarme de los filisteos por la pérdida de mis ojos».