«Yo, Ciro, rey de Persia, declaro que el Señor, Dios del cielo, me dio este imperio y ha puesto sobre mí la responsabilidad de edificarle un templo en Jerusalén, en la tierra de Judá.
Esdras 5:15 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008 Que el rey dio órdenes de devolver los utensilios a Jerusalén, y dejar que el templo de Dios fuera reconstruido en su sitio. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 y le dijo: Toma estos utensilios, ve, y llévalos al templo que está en Jerusalén; y sea reedificada la casa de Dios en su lugar. Biblia Nueva Traducción Viviente El rey le indicó que devolviera las copas a su lugar en Jerusalén y reconstruyera el templo de Dios en su sitio original. Biblia Católica (Latinoamericana) diciéndole: Toma esos objetos y devuélvelos al Templo de Jerusalén, y reconstruye el Templo de Dios en el mismo lugar que tenía antes. La Biblia Textual 3a Edicion Y le dijo: Toma estos utensilios, anda y ponlos en el Santuario que está en Jerusalem, y que la Casa de Dios sea reconstruida en su lugar. Biblia Serafín de Ausejo 1975 diciéndole: 'Toma estos objetos, y ve a devolverlos al templo de Jerusalén; y que el templo de Dios sea reconstruido en su mismo emplazamiento'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) y le dijo: Toma estos vasos, ve y ponlos en el templo que está en Jerusalén; y la casa de Dios sea reedificada en su lugar. |
«Yo, Ciro, rey de Persia, declaro que el Señor, Dios del cielo, me dio este imperio y ha puesto sobre mí la responsabilidad de edificarle un templo en Jerusalén, en la tierra de Judá.
El altar fue reedificado en su antiguo sitio, a pesar del miedo que tenían de la gente de los pueblos vecinos, y ofrecieron sacrificios al Señor, por la mañana y por la tarde.
Dicen, además, que el rey Ciro devolvió los utensilios de oro y plata que Nabucodonosor se había llevado del templo de Jerusalén, y los colocó en el templo de Babilonia. Dicen que estos utensilios fueron entregados al cuidado de un hombre llamado Sesbasar, a quien el rey Ciro nombró gobernador de Judá.
Entonces Sesbasar vino y echó los cimientos del templo en Jerusalén. El pueblo ha estado trabajando en ello desde entonces, pero aún no han terminado.
Primer año del reinado de Ciro. En cuanto al templo de Dios en Jerusalén, el rey Ciro decreta: Que se echen los cimientos y se reconstruya el templo para que los judíos puedan ofrecer los sacrificios. La altura será de veintisiete metros, y el ancho será de veintisiete metros.