¡Qué bella eres, amor mío! ¡Qué bella eres! Tus ojos son suaves como paloma.
Cantares 2:13 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008 Ya surgen las hojas y las viñas florecen. ¡Qué delicioso aroma! Levántate amor mío, hermosa mía y vámonos». Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 La higuera ha echado sus higos, Y las vides en cierne dieron olor; Levántate, oh amiga mía, hermosa mía, y ven. Biblia Nueva Traducción Viviente Las higueras comienzan a formar su fruto, y las vides fragantes están en flor. ¡Levántate, amada mía! ¡Ven conmigo, mi bella mujer!». Biblia Católica (Latinoamericana) Las higueras echan sus brotes
y las viñas nuevas exhalan su olor.
Levántate, amada mía, hermosa mía, y ven. La Biblia Textual 3a Edicion La higuera ya madura sus brevas, Y las vides en cierne exhalan su aroma. ¡Levántate, oh amada mía, hermosa mía, y ven! Biblia Serafín de Ausejo 1975 Despuntan las yemas de las brevas, las viñas en flor exhalan su fragancia. ¡Levántate, amada mía, hermosa mía, y ven! Biblia Reina Valera Gómez (2023) la higuera ha echado sus higos, y las viñas en cierne dan su fragancia: Levántate, oh amada mía, hermosa mía, y ven. |
¡Qué bella eres, amor mío! ¡Qué bella eres! Tus ojos son suaves como paloma.
Las pequeñas zorras están arruinando las viñas. Atrápalas; pues los viñedos están en flor.
Bajé al bosquecillo de nogales y salí al valle para contemplar la primavera, para ver si ya retoñaban las viñas o florecían los granados.
Yo me dije: «Subiré a la palmera y tomaré sus racimos». Sean ahora tus pechos como racimos de uvas y el aroma de tu aliento como manzanas,
Pero antes que lancen el ataque y mientras estén madurando sus planes como uvas, él los cortará como con podadora. Podará los zarcillos que se extienden.
El Señor mostrará a las naciones del mundo su justicia; todos lo alabarán. Su justicia será como un árbol con renuevos, o como huerto al comenzar la primavera, lleno de plantas que brotan por doquier.
Volverá a crecer como si fuera un árbol frondoso. Sus ramas se extenderán y serán tan hermosas como las de los olivos y tan fragantes como los cedros del Líbano.
Aunque todavía no tienen alimentos en los graneros, y aunque aún las vides, las higueras, los granados y los olivos no dan frutos, les prometo que a partir de hoy no les faltará nada, pues les voy a regalar con abundancia de todo”».
»Apréndanse bien la lección de la higuera. Cuando la rama está tierna y brotan las hojas, se sabe que el verano está cerca.
Y dijo: ―¡Cómo me gustaría que hoy entendieras lo que puede traerte paz! Pero ahora eso no lo puedes ver.
Somos embajadores de Cristo. Dios les habla a ustedes por medio de nosotros: «En el nombre de Cristo les rogamos, ¡reconcíliense con Dios!».