Bíobla ar líne

Fógraí


An Bíobla ar fad Sean-Tiomna Tiomna Nua




Cantares 1:13 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008

Mi amado es bolsita de mirra entre mis pechos.

Féach an chaibidil
Taispeáin Interlinear Bible

Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

Mi amado es para mí un manojito de mirra, Que reposa entre mis pechos.

Féach an chaibidil

Biblia Nueva Traducción Viviente

Mi amante es como una bolsita de mirra que reposa entre mis pechos.

Féach an chaibidil

Biblia Católica (Latinoamericana)

Mi amado es para mí bolsita de mirra cuando reposa entre mis pechos.

Féach an chaibidil

La Biblia Textual 3a Edicion

Mi amado es para mí un manojito de mirra, Que reposa entre mis pechos.

Féach an chaibidil

Biblia Serafín de Ausejo 1975

Saquito de mirra es mi amado para mí descansando entre mis pechos;

Féach an chaibidil

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

Mi amado es para mí un manojito de mirra, que reposa toda la noche entre mis pechos.

Féach an chaibidil
Aistriúcháin eile



Cantares 1:13
14 Tagairtí Cros  

Entonces Israel, su padre, finalmente les dijo: ―Si no se puede evitar, entonces por lo menos hagan esto: Carguen los burros con los mejores productos de la tierra: bálsamo, miel, especias, mirra, nueces y almendras, y llévenle todo eso a aquel hombre.


Tus vestiduras exhalan perfume de mirra, áloe y casia. En tus palacios adornados de marfil hay música de arpa para deleite tuyo.


Mujeres de Jerusalén, les ruego por las gacelas y cervatillas del bosque que no despierten a mi amada. ¡Déjenla dormir!


Les ruego, mujeres de Jerusalén, por las gacelas y cervatillas del bosque que no despierten a mi amada. ¡Déjenla dormir!


¿Quién es este que irrumpe de los desiertos como nube de humo por la tierra, entre aromas de mirra e incienso y perfumes exóticos?


nardo y azafrán, cálamo aromático y canela, y perfume de todo árbol de incienso; además de mirra y áloe, y toda especia preciosa.


Ven, viento del norte; despierta; ven, viento del sur, sopla sobre mi huerto y llévale a mi amado su dulce perfume. Que venga él a su huerto y coma su fruto más exquisito.


Hasta que despunte el día y huyan las sombras, subiré yo al monte de mirra y a la colina de incienso.


Aquí estoy en mi huerto, amada mía, novia mía. Reúno la mirra con las especias mías y como mi panal con la miel. Bebo mi vino con mi leche. ¡Oh, amado y amada, coman y beban! ¡Sí, beban hasta saciarse!


Sus mejillas son como lecho de dulce bálsamo, como cultivos de aromáticas hierbas. Perfumados lirios son sus labios, como mirra es su aliento.


Salté para abrirle; mis manos destilaban perfume y mis dedos preciosa mirra cuando empujé el cerrojo.


También Nicodemo, el que había visitado a Jesús de noche, llegó con unos treinta y cuatro kilos de una mezcla de mirra y áloe.


Pido también que, por medio de la fe, Cristo habite en sus corazones, y que ustedes echen raíces y se cimienten en el amor,