Que el Señor los recompense fielmente y les reconfirme su amor. Yo también tendré en cuenta el bien que ustedes han hecho.
2 Timoteo 1:16 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008 Que el Señor sea misericordioso con Onesíforo y toda su familia, porque muchas veces me confortó y nunca se avergonzó de que yo estuviera preso. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Tenga el Señor misericordia de la casa de Onesíforo, porque muchas veces me confortó, y no se avergonzó de mis cadenas, Biblia Nueva Traducción Viviente Que el Señor muestre una bondad especial con Onesíforo y toda su familia, porque él me visitó muchas veces y me dio ánimo. Jamás se avergonzó de que yo estuviera en cadenas. Biblia Católica (Latinoamericana) Que el Señor bendiga a la familia de Onesíforo, pues a menudo vino a confortarme y no se avergonzó de mis cadenas. La Biblia Textual 3a Edicion Conceda el Señor misericordia a la casa de Onesíforo, pues muchas veces me reanimó y no se avergonzó de mis cadenas, Biblia Serafín de Ausejo 1975 ¡Tenga el Señor piedad con la casa de Onesíforo, que tantas veces me ha dado ánimos y no sólo no se ha avergonzado de mis cadenas, Biblia Reina Valera Gómez (2023) Dé el Señor misericordia a la casa de Onesíforo; que muchas veces me dio refrigerio, y no se avergonzó de mis cadenas; |
Que el Señor los recompense fielmente y les reconfirme su amor. Yo también tendré en cuenta el bien que ustedes han hecho.
«¡Dios mío, recuerda estas acciones mías, y no olvides todo lo que he hecho por tu templo y por tu culto!».
Y ordené a los levitas que se purificaran y que vigilaran las puertas con el fin de preservar la santidad del día de reposo. «¡Recuerda esta acción, Dios mío, y ten compasión de mí, según tu gran misericordia!».
Ellos proveyeron la leña para el altar en el tiempo propicio, y se ocuparon de los sacrificios y de las primicias de todas las cosechas. «¡Acuérdate de mí, Dios mío, y ten misericordia de mí!».
¡Dios mío, recuerda todo lo que he hecho por este pueblo y dame tu bendición!
Señor, ¡qué fiel eres con los fieles! ¡Que intachable eres con los intachables!
Por el contrario, los justos pueden ser generosos dando obsequios y préstamos al prójimo, y sus hijos son una bendición.
pero a ti te libraré, no serás muerto por aquellos a quienes tanto temes.
El que recibió los veinte mil pesos los invirtió también y ganó veinte mil pesos.
¡Dichosos los que tienen compasión de otros, porque Dios tendrá compasión de ellos!
El jefe de la guarnición arrestó al apóstol y ordenó que lo ataran con dos cadenas. Luego preguntó quién era y qué había hecho.
Yo les he pedido que vengan para verlos y hablar con ustedes. Estoy preso porque tengo la misma esperanza que tiene el pueblo de Israel.
Me tranquilizaron muchísimo, lo mismo que a ustedes. Espero que ustedes reconozcan la obra que estos hermanos realizan.
Dios me ha enviado como su representante para predicar este mensaje, y precisamente por eso ahora estoy preso. Oren para que lo anuncie sin temor alguno, pues ese es mi deber.
Por ese motivo padezco estos sufrimientos. Mas no me avergüenzo, porque sé en quién he creído, y estoy seguro de que puede guardar lo que le he encomendado hasta el día de su retorno.
Al contrario, cuando estuvo en Roma me buscó por todas partes y por fin me halló.
Que el Señor le conceda hallar misericordia delante de Dios en aquel día. Tú sabes mejor que yo lo mucho que me ayudó en Éfeso.
Así que no te avergüences de hablar de nuestro Señor, ni de mí, que estoy preso por la causa de Cristo. Al contrario, debes ser capaz de sufrir por el evangelio, pues Dios te dará fuerzas.
Saluda en mi nombre a Priscila y a Aquila, y a los de la casa de Onesíforo.
Sí, hermano, alegra mi corazón en Cristo con este gesto de amor que te pido en el Señor.
Yo mismo he hallado gran gozo y consuelo en tu amor, hermano mío, porque los corazones de los que pertenecen al pueblo santo de Dios han hallado refrigerio en tu bondad.
También tuvieron compasión de los que estaban en la cárcel, y cuando a ustedes les quitaron sus posesiones, lo aceptaron con alegría porque sabían que tenían un patrimonio mejor y más duradero.
Dios no es injusto. ¿Cómo podría él olvidar el ardor con que ustedes han trabajado o el amor que le han demostrado y le siguen demostrando al ayudar a los del pueblo santo?
Pero después de comenzado el viaje de regreso, Noemí dijo a sus dos nueras: ―¿Por qué no regresan mejor a casa de sus padres? Quizás Dios las recompense por la fidelidad que han mostrado a sus maridos y a mí.