El rey entonces envió a algunos espías para ver si Eliseo tenía razón. Se confirmó el hecho, y así se salvaron de un desastre. Esto ocurrió repetidas veces.
2 Reyes 6:11 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008 El rey de Siria, asombrado, convocó a sus oficiales y les preguntó: ―¿Quién de ustedes es el traidor? ¿Quién ha estado revelándole mis planes al rey de Israel? Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Y el corazón del rey de Siria se turbó por esto; y llamando a sus siervos, les dijo: ¿No me declararéis vosotros quién de los nuestros es del rey de Israel? Biblia Nueva Traducción Viviente Esa situación disgustó mucho al rey de Aram y llamó a sus oficiales y les preguntó: —¿Quién de ustedes es el traidor? ¿Quién ha estado informándole al rey de Israel acerca de mis planes? Biblia Católica (Latinoamericana) El rey de Aram se preocupó mucho por eso; convocó a sus servidores y les dijo: 'Díganme quién de nosotros está con el rey de Israel'. La Biblia Textual 3a Edicion Y el corazón del rey de Siria estaba turbado por tal motivo, y llamando a sus siervos, les preguntó: ¿Acaso no me diréis quién de los nuestros está a favor del rey de Israel? Biblia Serafín de Ausejo 1975 Se turbó el corazón del rey de Aram por este hecho; convocó a sus servidores y les dijo: '¿No me váis a descubrir quién es el que avisa al rey de Israel?'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y el corazón del rey de Siria fue turbado por esto; y llamando a sus siervos, les dijo: ¿No me declararéis vosotros quién de los nuestros es del rey de Israel? |
El rey entonces envió a algunos espías para ver si Eliseo tenía razón. Se confirmó el hecho, y así se salvaron de un desastre. Esto ocurrió repetidas veces.
―Ninguno de nosotros —contestó uno de los oficiales—. Es el profeta Eliseo el que le dice al rey de Israel las mismas palabras que tú hablas en lo más privado de tu habitación.
¿Es por eso que están ustedes en contra mía? Porque ninguno de ustedes me contó jamás que mi hijo, mi propio hijo, había hecho un pacto con el hijo de Isaí. Ni siquiera sienten pena por mí. ¿Se dan cuenta? ¡Mi propio hijo ha persuadido a ese siervo mío llamado David para que me aceche!
Cuando la mujer lo vio tan confundido le dijo: ―Señor, yo obedecí tu orden con riesgo de mi vida.