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2 Reyes 1:15 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008

Entonces el ángel del Señor le dijo a Elías: «No temas. Ve con él». Y Elías fue ante la presencia del rey.

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Biblia Reina Valera 1960

Entonces el ángel de Jehová dijo a Elías: Desciende con él; no tengas miedo de él. Y él se levantó, y descendió con él al rey.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

Entonces el ángel del Señor dijo a Elías: «Desciende con él y no le tengas miedo». Así que Elías se levantó y fue con el capitán a ver al rey.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

Entonces el ángel de Yavé dijo a Elías: 'Baja con él, pues nada tienes que temer de su parte'. Se levantó pues y bajó con ellos hasta donde estaba el rey.

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La Biblia Textual 3a Edicion

Entonces el ángel° de YHVH dijo a Elías: Baja con él, no tengas temor de su rostro.° Y se levantó y bajó con él al rey.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

Dijo entonces el ángel de Yahveh a Elías: 'Baja con él y no le tengas miedo'. Se levantó, pues, y bajó adonde estaba el rey.

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

Entonces el ángel de Jehová dijo a Elías: Desciende con él; no tengas miedo de él. Y él se levantó, y descendió con él al rey.

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2 Reyes 1:15
11 Tagairtí Cros  

Poco tiempo después, el Señor le dijo a Abram: ―Abram, no tengas miedo, porque yo te protejo, y te voy a dar una recompensa muy grande.


Pero Elías le dijo: ―Te juro por el Señor, el Dios Todopoderoso, en cuya presencia estoy, que hoy me presentaré ante Acab.


Yo sé que los otros dos oficiales y sus soldados, que vinieron antes de nosotros, murieron quemados por el fuego que cayó del cielo. Por eso, te pido que nos perdones la vida.


Pero un ángel del Señor le dijo al profeta Elías: «Ve al encuentro de los mensajeros que el rey de Samaria ha enviado a Ecrón, y pregúntales: “¿Es que no hay Dios en Israel, que van a preguntarle a Baal Zebub, el dios de Ecrón, si el rey se pondrá bien?”.


El Señor es mi luz y mi salvación; ¿a quién temeré? El Señor me protege del peligro, ¿quién podrá amedrentarme?


Yo, sí, yo soy el que te conforta y te da todo este gozo. Así pues, ¿por qué temer a los simples mortales que cual la hierba se marchitan y desaparecen?


Así que levántate, vístete y ve a decirles cuanto yo te mande. No les tengas miedo, mantén una postura firme ante ellos.


Lucharán contra ti como ejército sitiador contra una alta muralla. Pero no te vencerán porque yo estoy contigo para protegerte y librarte, dice el Señor.


Hombre mortal, no tengas temor de ellos, no te asustes, aun cuando te amenacen con arrojarte a un pozo lleno de escorpiones. No desmayes ante sus semblantes airados, pues acuérdate que son rebeldes.


No teman a los que pueden matar el cuerpo pero no pueden tocar el alma. Sólo teman a Dios, que es el único que puede destruir alma y cuerpo en el infierno.


Por la fe salió de Egipto sin tenerle miedo al enojo del faraón. Y se mantuvo firme como si estuviera viendo al Invisible.