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2 Crónicas 2:1 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008

Salomón decidió construir un templo para el Señor, y su propio palacio real.

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Biblia Reina Valera 1960

Determinó, pues, Salomón edificar casa al nombre de Jehová, y casa para su reino.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

Salomón decidió construir un templo para honrar el nombre del Señor y también un palacio real para sí mismo.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

Salomón alistó setenta mil hombres para transportar cargas, ochenta mil canteros en el monte y tres mil seiscientos capataces para ellos.

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La Biblia Textual 3a Edicion

Y Salomón se propuso edificar una Casa para el nombre de YHVH, y una casa real para sí.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

Salomón alistó setenta mil hombres para transportar cargas y ochenta mil hombres para extraer piedras de la montaña, y puso al frente de ellos a tres mil seiscientos capataces.

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

Determinó, pues, Salomón edificar casa al nombre de Jehová, y una casa para su reino.

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2 Crónicas 2:1
13 Tagairtí Cros  

Salomón también tenía setenta mil cargadores, ochenta mil canteros que trabajaban en las montañas,


Por eso, pienso edificar un templo para el Señor mi Dios, en conformidad a la promesa que le hizo a mi padre de que yo lo edificaría. Porque el Señor le dijo: “Tu hijo, a quien pondré en tu lugar en el trono, me edificará un templo”.


Luego Salomón edificó su propia casa. La construcción tardó trece años.


pero el Señor no se lo permitió. El Señor le dijo: “Me complace que quieras construirme una casa, pero


Y ahora el Señor ha cumplido su palabra, porque he sucedido a mi padre como rey de Israel, y ya he edificado el templo del Señor, Dios de Israel.


Cuando Salomón terminó de edificar el templo del Señor, la casa del rey y todos los edificios que se propuso construir,


Él construirá mi templo, y será como mi propio hijo, y seré para él su Padre, y haré que sus hijos y descendientes reinen sobre cada generación de Israel”.


En esa época, un carro de combate traído de Egipto costaba seiscientas monedas de plata, y un caballo costaba ciento cincuenta monedas de plata. Muchos eran luego vendidos a los reyes de los hititas y de los sirios.


Bendito sea el Señor, Dios de Israel, que hizo los cielos y la tierra, y que ha dado a David un hijo tan sabio, inteligente y entendido para edificar el templo del Señor y un palacio real.


llevarás todos tus sacrificios y ofrendas al santuario, al lugar que Dios elegirá como su morada.


»Si te niegas a obedecer todas las leyes escritas en este libro, rechazando la reverencia y la gloria que merece el nombre del Señor tu Dios.