Su territorio abarcaba desde Sidón hasta Guerar y Gaza, y pasaba por Sodoma, Gomorra, Admá y Zeboyín, y llegaba hasta Lasa.
2 Crónicas 14:12 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008 Entonces el Señor derrotó a los etíopes. Fue así como el rey Asá y el ejército de Judá pusieron en fuga a los etíopes. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Y Jehová deshizo a los etíopes delante de Asa y delante de Judá; y huyeron los etíopes. Biblia Nueva Traducción Viviente Entonces el Señor derrotó a los etíopes en presencia de Asa y del ejército de Judá, y el enemigo huyó. Biblia Católica (Latinoamericana) Asá y la gente que estaba con él los persiguieron hasta Guerar y cayeron de los etíopes hasta no quedar uno vivo, pues fueron destrozados delante de Yavé y su campamento; y se recogió un botín inmenso. La Biblia Textual 3a Edicion Y YHVH derrotó a los etíopes delante Asa y de Judá, y los etíopes huyeron. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Asá y su ejército los persiguieron hasta Guerar. Cayeron tantos etíopes que no quedó uno vivo, porque quedaron exterminados ante Yahveh y su ejército. Y se llevaron un grandísimo botín. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y Jehová deshizo a los etíopes delante de Asa y delante de Judá; y huyeron los etíopes. |
Su territorio abarcaba desde Sidón hasta Guerar y Gaza, y pasaba por Sodoma, Gomorra, Admá y Zeboyín, y llegaba hasta Lasa.
Al derrotar a sus enemigos, se quedaron con su ganado, que se componía de cincuenta mil camellos, doscientas cincuenta mil ovejas y dos mil burros; además capturaron a cien mil personas.
Sisac atacó con mil doscientos carros de combate, sesenta mil jinetes y un sinnúmero de hombres de infantería: egipcios, libios, suquíes y etíopes.
y los soldados de Judá comenzaron a gritar y, a medida que gritaban, Dios, valiéndose del rey Abías y de los hombres de Judá, derrotó a Jeroboán.
y sacrificaron, en honor al Señor, setecientos toros y siete mil ovejas del botín que habían recogido en la batalla.
Cuando comenzaron a entonar este coro, el Señor hizo que los hijos de Amón, Moab y de Seír comenzaran a pelear entre sí, y se mataran unos a otros.
Con el auxilio de Dios, realizaremos proezas, porque él pisoteará a nuestros enemigos.
Este mismo día el Señor sacó a Israel de Egipto, tribu por tribu, como si fueran un ejército.
Las ruedas de sus carros de guerra se atascaron, de modo que avanzaban muy lentamente. Entonces los egipcios gritaron: «¡Salgamos de aquí, porque el Señor está peleando por ellos contra nosotros!».
El Señor ha dicho: «Israelitas, ¿acaso no son ustedes para mí iguales que los cursitas? ¿Acaso yo, que los saqué a ustedes de Egipto, no he hecho lo mismo con otros pueblos también? Yo saqué de Creta a los filisteos y de Quir a los sirios. Lo ha dicho el Señor.
¡Gracias a Dios que nos da la victoria por medio de Jesucristo, nuestro Señor!
Por lo tanto, yo corro teniendo una meta bien clara; yo peleo para ganar, no como quien da golpes al viento.
»El Señor derrotará a tus enemigos. Ellos vendrán juntos en tu contra, pero delante de ti huirán en siete direcciones.
»”¿No ven que sólo yo soy Dios? Yo hago morir y hago vivir. Yo hago la herida y yo la sano: nadie se escapa de mi poder.
El Señor hizo cundir el pánico entre ellos, y los israelitas hicieron una gran matanza en Gabaón y los persiguió hasta Bet Jorón, Azeca y Maquedá, dándoles muerte a lo largo del camino.