El chismoso revela los secretos, pero el hombre confiable los guarda.
1 Timoteo 5:13 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008 Además, se acostumbran a estar ociosas y andar de casa en casa y se vuelven perezosas, chismosas y entrometidas, hablando de lo que no deben. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Y también aprenden a ser ociosas, andando de casa en casa; y no solamente ociosas, sino también chismosas y entremetidas, hablando lo que no debieran. Biblia Nueva Traducción Viviente Y, si están en la lista, se acostumbrarán a ser perezosas y pasarán todo el tiempo yendo de casa en casa chismeando, entrometiéndose en la vida de los demás y hablando de lo que no deben. Biblia Católica (Latinoamericana) Aprenden además a no hacer nada y se acostumbran a andar de casa en casa. Como no tienen nada que hacer, hablan de más, se meten en lo que no les toca y dicen lo que no deben. La Biblia Textual 3a Edicion y aprenden también a estar ociosas, yendo de casa en casa; y no sólo ociosas, sino también chismosas y entremetidas, hablando las cosas que no deben. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Al mismo tiempo se acostumbran a estar ociosas, a ir de casa en casa; y no sólo están ociosas, sino que dicen tonterías y frivolidades, y hablan de lo que no deben. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y así también aprenden a ser ociosas, andando de casa en casa; y no solamente ociosas, sino también chismosas e indiscretas, hablando cosas que no debieran. |
El chismoso revela los secretos, pero el hombre confiable los guarda.
El chismoso cuenta los secretos; no te juntes con el que habla de más.
Observa con cuidado lo que sucede en su casa, y no come el pan por el que no ha trabajado.
»No acusen falsamente de algún delito a su prójimo, porque yo soy el Señor.
Quédense en la misma casa, coman y beban lo que allí les den, porque el trabajador tiene derecho a su salario. No anden de casa en casa.
Además, ustedes están conscientes de que jamás he vacilado en anunciarles y enseñarles nada que les fuera útil, en público o en privado.
Y algunos de ustedes mismos falsearán la verdad para arrastrar seguidores.
Es preciso taparles la boca, pues en su afán por ganar dinero enseñando lo que no deben, ya han apartado de la verdad a varias familias.
De una misma boca salen bendiciones y maldiciones. Hermanos míos, esto no debe ser así.
Si alguno de ustedes sufre, que no sea por ser asesino, ladrón o malhechor, ni siquiera por meterse en los asuntos ajenos.
Por eso, cuando yo vaya, le voy a llamar la atención por su mala conducta y por los chismes y las cosas malas que anda diciendo de nosotros. No sólo se niega a recibir a los hermanos que por allí pasan, sino que prohíbe que los demás lo hagan, amenazándolos con expulsarlos de la iglesia.