También llegó de Jerusalén Mefiboset, nieto de Saúl. No se había lavado los pies ni la ropa, ni se había cortado la barba desde el día en que el rey salió de Jerusalén. El rey le preguntó: ―¿Por qué no viniste conmigo, Mefiboset?
1 Reyes 2:8 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008 »¿Te acuerdas de Simí hijo de Guerá, el benjaminita de Bajurín? Él me maldijo con terrible maldición el día que yo iba a Majanayin. Pero cuando volvió ante mi presencia junto al río Jordán, prometí no matarlo. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 También tienes contigo a Simei hijo de Gera, hijo de Benjamín, de Bahurim, el cual me maldijo con una maldición fuerte el día que yo iba a Mahanaim. Mas él mismo descendió a recibirme al Jordán, y yo le juré por Jehová diciendo: Yo no te mataré a espada. Biblia Nueva Traducción Viviente »Acuérdate de Simei, hijo de Gera, el hombre de Bahurim de la tribu de Benjamín. Él me maldijo con una maldición terrible cuando yo escapaba hacia Mahanaim. Cuando vino a verme al río Jordán, yo le juré por el Señor que no lo mataría; Biblia Católica (Latinoamericana) Cerca de ti tienes a Simei, hijo de Guera, el benjaminita de Bajurim que me insultó cuando huía hacia Majanayim. Me maldijo de una manera horrible pero, cuando fue a recibirme en el Jordán, le juré por Yavé que no lo condenaría a muerte. La Biblia Textual 3a Edicion He aquí, tienes contigo a Simei ben Gera, benjamita, hijo de Bahurim, quien me maldijo con una cruel maldición el día que yo iba a Mahanaim. Pero él bajó a recibirme al Jordán, por lo que le juré por YHVH diciendo: No te haré morir con la espada. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Ahí tienes también a tu lado a Semeí, hijo de Guerá, el benjaminita de Bajurín, que me lanzó terribles maldiciones el día en que iba yo a Majanáin. Aunque después él bajó a mi encuentro al Jordán y yo le juré por Yahveh: 'No te haré morir a espada', Biblia Reina Valera Gómez (2023) También tienes contigo a Simeí, hijo de Gera, hijo de Benjamín, de Bahurim, el cual me maldijo con una maldición fuerte el día que yo iba a Mahanaim. Mas cuando él descendió a mi encuentro al Jordán, yo le juré por Jehová, diciendo: Yo no te mataré a espada. |
También llegó de Jerusalén Mefiboset, nieto de Saúl. No se había lavado los pies ni la ropa, ni se había cortado la barba desde el día en que el rey salió de Jerusalén. El rey le preguntó: ―¿Por qué no viniste conmigo, Mefiboset?
Es probable que sea su único abrigo, de modo que no tendrá con qué cobijarse en la noche. Si no le devuelven su túnica, y él clama a mí, entonces yo lo atenderé, porque soy muy compasivo.
y si juras pertenecerme sólo a mí, el Dios viviente, e inicias una vida buena, honrada y limpia, serás testimonio para las naciones del mundo y estas acudirán a mí y servirán también para difundir mi gran fama!