Depuso a su abuela Macá, como reina madre, debido a que ella había hecho un ídolo. Asá destruyó y quemó este ídolo en el arroyo de Cedrón.
1 Reyes 18:19 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008 Ahora, convoca a todo el pueblo de Israel. Diles que vayan al monte Carmelo, junto con los cuatrocientos cincuenta profetas de Baal y los cuatrocientos profetas de la diosa Aserá, que tienen el apoyo de Jezabel. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Envía, pues, ahora y congrégame a todo Israel en el monte Carmelo, y los cuatrocientos cincuenta profetas de Baal, y los cuatrocientos profetas de Asera, que comen de la mesa de Jezabel. Biblia Nueva Traducción Viviente Ahora, convoca a todo Israel para que se reúna conmigo en el monte Carmelo, junto con los cuatrocientos cincuenta profetas de Baal y los cuatrocientos profetas de Asera, a quienes Jezabel mantiene. Biblia Católica (Latinoamericana) Anda pues a reunir a Israel; que vengan conmigo al monte Carmelo, y con ellos los cuatrocientos cincuenta profetas de Baal que comen de la mesa de Jezabel'. La Biblia Textual 3a Edicion Ahora pues, envía y convócame a todo Israel en el monte Carmelo, y a los cuatrocientos cincuenta profetas de Baal, y los cuatrocientos profetas de las aseras, los cuales comen a la mesa de Jezabel. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Ahora, manda reunir en torno mío a todo Israel en el monte Carmelo, así como a los cuatrocientos cincuenta profetas de Baal que comen a la mesa de Jezabel'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Envía, pues, ahora y reúneme a todo Israel en el monte Carmelo, y a los cuatrocientos cincuenta profetas de Baal, y a los cuatrocientos profetas de Asera, que comen de la mesa de Jezabel. |
Depuso a su abuela Macá, como reina madre, debido a que ella había hecho un ídolo. Asá destruyó y quemó este ídolo en el arroyo de Cedrón.
Luego hizo otros ídolos, como el de la diosa Aserá, y con esto provocó la ira del Señor, Dios de Israel, más que cualquiera de los demás reyes que Israel había tenido antes de él.
Entonces Acab convocó a todo el pueblo y a los profetas en el monte Carmelo.
Y añadió: ―Yo soy el único profeta que queda de los profetas del Señor, pero Baal tiene cuatrocientos cincuenta profetas.
Entonces el rey Acab convocó a sus cuatrocientos profetas paganos y les preguntó: ―¿Atacaremos a Ramot de Galaad? Y ellos respondieron: ―Sí, vayan, porque el Señor les ayudará a conquistarla.
Convoquen a todos los profetas y sacerdotes de Baal, y reúnan a todos sus adoradores. Asegúrense de que no falte ninguno, porque nosotros los adoradores de Baal vamos a hacer una gran celebración en su honor. Cualquiera de los adoradores que no venga, morirá». Jehú estaba invitando a esto, pues su plan era matar a todos los adoradores de Baal.
Con todo eso, no se apartaron del pecado, sino siguieron el mal ejemplo de Jeroboán. Y continuaron adorando a la diosa Aserá de Samaria.
―No quiero nada contigo —le dijo Eliseo al rey Jorán, de Israel—. Ve y pregúntales a los falsos profetas de tu padre y de tu madre. Pero Jorán le respondió: ―No, porque es el Señor quien nos ha traído aquí para ser destruidos por el rey de Moab.
―¿Vienes como amigo, Jehú? —le preguntó el rey Jorán. Jehú le respondió: ―¿Cómo puede haber amistad entre nosotros, si todavía sufrimos debido a las idolatrías y hechicerías de Jezabel, tu madre?
Todo esto, a pesar de que sentaba regularmente a mi mesa a ciento cincuenta funcionarios judíos, sin contar a los visitantes de los países vecinos.
Yo sabía que los profetas de Samaria eran increíblemente perversos, porque profetizaban mediante Baal e inducían a mi pueblo a actuar perversamente.
¡Téngalo por absolutamente seguro, dice el Rey, el Señor de los ejércitos, que viene contra Egipto uno tan alto como el monte Tabor o el monte Carmelo junto al mar!
Este es su mensaje: «Desde Sion el Señor rugirá como un león, desde Jerusalén lanzará un poderoso grito. Será tan terrible su grito que los pastos de los campos se secarán y se resecará la cumbre del monte Carmelo».
»Aunque se escondan entre las rocas en la cima del monte Carmelo, yo los buscaré allá y los capturaré. Aunque se escondan en el fondo del océano, yo enviaré la serpiente marina tras ellos para morderlos y destruirlos.
Pero así como en el pasado hubo falsos profetas, entre ustedes surgirán falsos maestros que veladamente les mentirán acerca de Dios y hasta negarán al mismo Señor que los salvó. ¡La condenación de los tales será repentina y terrible!
Y la bestia cayó presa, y con ella el falso profeta que podía realizar milagros en presencia de la bestia. Con esos milagros había engañado a los que aceptaron la marca de la bestia y adoraron su imagen. Los dos fueron arrojados vivos en el lago de fuego que arde con azufre.
Sin embargo, tengo esto contra ti: Tú permites que Jezabel, la que dice ser profetisa, enseñe a mis siervos a practicar inmoralidades sexuales y a comer carne sacrificada a los ídolos.
Al día siguiente, de madrugada, salió a buscar a Saúl. Alguien le dijo que había ido al monte Carmelo a edificar un monumento para sí, y que luego se había ido a Gilgal.