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1 Crónicas 20:8 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008

Estos fueron los gigantes descendientes de Rafá, el gigante de Gat, a quienes David y sus oficiales dieron muerte.

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Biblia Reina Valera 1960

Estos eran descendientes de los gigantes en Gat, los cuales cayeron por mano de David y de sus siervos.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

Estos filisteos eran descendientes de los gigantes de Gat, pero David y sus guerreros los mataron.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

Estos son los que descendían de Rafá de Gat, que murieron en manos de David y de sus tropas.

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La Biblia Textual 3a Edicion

Éstos fueron los descendientes de Rafaim en Gat, los cuales cayeron por mano de David y por mano de sus siervos.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

Estos hombres eran descendientes de Rafá, de Gat, y sucumbieron a mano de David y de sus servidores.

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

Estos fueron hijos del gigante de Gat, los cuales cayeron por mano de David y de sus siervos.

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1 Crónicas 20:8
8 Tagairtí Cros  

Entonces, un gigante llamado Isbibenob intentó matarlo. Este hombre llevaba una espada nueva y una lanza de bronce, cuya sola punta pesaba más de tres kilos.


Fue así como esos cuatro gigantes, descendientes de Rafá, el de Gat, fueron muertos por los soldados de David.


Satanás se levantó contra Israel, pues incitó a David a hacer un censo.


Volví a mirar por toda la tierra y descubrí que no siempre el más veloz gana la carrera, ni el más fuerte la batalla; que los sabios suelen ser pobres y los hombres diestros no son por fuerza famosos; todo es cuestión de suerte; de estar en el sitio adecuado en el momento oportuno.


El Señor dice: No se enorgullezca el sabio en su sabiduría, ni el poderoso en su poder, ni el rico en su riqueza.


¿Qué más se puede decir? Si Dios está de parte nuestra, ¿quién podrá estar contra nosotros?


Por lo tanto, te pido que me des la región montañosa que el Señor me prometió. Recordarás que cuando exploramos la tierra vimos que los anaceos vivían allí en ciudades con murallas muy grandes, pero si el Señor está conmigo yo los echaré de allí, como él prometió».