Yo los saqué de Egipto, y ustedes son mis siervos. Por lo tanto, no podrán venderse como esclavos comunes
1 Corintios 7:23 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008 Ustedes han sido comprados por un gran precio; no se vuelvan esclavos de nadie. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Por precio fuisteis comprados; no os hagáis esclavos de los hombres. Biblia Nueva Traducción Viviente Dios pagó un alto precio por ustedes, así que no se dejen esclavizar por el mundo. Biblia Católica (Latinoamericana) Ustedes han sido comprados a un precio muy alto; no se hagan esclavos de otros hombres. La Biblia Textual 3a Edicion Por precio fuisteis comprados, no os hagáis esclavos de los hombres. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Se ha pagado por vosotros un buen precio. No os hagáis esclavos de hombres. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Por precio sois comprados; no os hagáis siervos de los hombres. |
Yo los saqué de Egipto, y ustedes son mis siervos. Por lo tanto, no podrán venderse como esclavos comunes
»Nadie puede servir a dos amos. No puedes servir a Dios y al dinero, pues amarás a uno y odiarás al otro, o servirás a uno y despreciarás al otro.
Por lo tanto, ¡cuídense y cuiden el rebaño! ¡Deben pastorear la iglesia que él compró con su sangre! ¡El Espíritu Santo les ha dado a ustedes la responsabilidad de cuidarla!
porque Dios nos compró a gran precio. Por tanto, honren con su cuerpo a Dios.
El hecho es que algunos mal llamados hermanos fueron a observar disimuladamente la libertad que teníamos en Cristo Jesús, y ¡querían encadenarnos a sus leyes como si fuéramos esclavos!
Él se entregó a la muerte por nosotros para poder rescatarnos de todas nuestras iniquidades y convertirnos en un pueblo que fuera suyo, dedicado a hacer el bien.
Porque Cristo murió por los pecados una vez y para siempre, el justo por los injustos, para llevarlos a ustedes a Dios. Él sufrió la muerte en su cuerpo, pero el Espíritu hizo que volviera a la vida.
y dedicaron al Cordero este nuevo canto: «Eres digno de recibir el pergamino y de romper sus sellos, porque fuiste sacrificado y con tu sangre compraste para Dios un pueblo de entre todos los linajes, pueblos, lenguas y naciones.