¡Ay de vosotros, escribas y fariseos, hipócritas! porque os tragáis las casas de las viudas, y, por un disfraz, hacéis largas oraciones: por esto llevaréis más abundante condenación.
Tito 1:10 - Biblia Version Moderna (1929) ¶Porque hay muchos turbulentos, vanos palabreros e impostores, especialmente los de la circuncisión, Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Porque hay aún muchos contumaces, habladores de vanidades y engañadores, mayormente los de la circuncisión, Biblia Nueva Traducción Viviente Pues hay muchos rebeldes que participan en conversaciones inútiles y engañan a otros. Me refiero especialmente a los que insisten en que es necesario circuncidarse para ser salvo. Biblia Católica (Latinoamericana) Porque hay muchos espíritus rebeldes, charlatanes y engañadores, sobre todo entre los de origen judío. La Biblia Textual 3a Edicion Porque hay muchos insubordinados, charlatanes y embaucadores, especialmente los de la circuncisión, Biblia Serafín de Ausejo 1975 Porque hay muchos rebeldes y charlatanes, especialmente entre los procedentes de la circuncisión, que inducen a engaño. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Porque hay muchos contumaces, y habladores de vanidad y engañadores, mayormente los que son de la circuncisión, |
¡Ay de vosotros, escribas y fariseos, hipócritas! porque os tragáis las casas de las viudas, y, por un disfraz, hacéis largas oraciones: por esto llevaréis más abundante condenación.
Y cuando hubo subido Pedro a Jerusalem, contendieron con él los que eran de la circuncisión,
Y CIERTOS hombres que habían descendido desde Judea, enseñaron a los hermanos, diciendo: A menos que seáis circuncidados, conforme a la institución de Moisés, no podéis ser salvos.
Por cuanto hemos sabido que ciertas personas que han salido de entre nosotros, os han turbado con palabras, subvertiendo vuestras almas, a quienes nosotros no dimos autorización;
Yo sé que después de mi partida entrarán entre vosotros lobos voraces, que no perdonarán el rebaño.
y eso, a pesar de los falsos hermanos, introducidos furtivamente, los cuales se entraban clandestinamente, para espiar la libertad nuestra que tenemos en Cristo Jesús, a fin de reducimos a servidumbre:
¡OH gálatas insensatos! ¿quién os alucinó a vosotros, ante cuyos ojos Jesucristo ha sido claramente representado como crucificado?
para que ya no seamos niños, fluctuando de acá para allá, y llevados en derredor por todo viento de enseñanza, por medio de las tretas de los hombres, y su astucia en las artes sutiles del error;
ni se ocupasen en fábulas y genealogías interminables, que promueven disputas, más bien que edificación divina, así ahora vuelvo a rogarte lo mismo.
de las cuales cosas desviándose algunos, se han apartado de la verdad a una vana palabrería,
conociendo esto, que la ley no fué dada para el hombre justo, sino para los inicuos y los turbulentos, para los impíos y los pecadores, para los malvados y los profanos, para los parricidas y los matricidas, para los homicidas,
Empero los hombres malos y los impostores irán de mal en peor, engañando, y siendo ellos mismos engañados.
si alguno fuere sin tacha, marido de una sola mujer, teniendo hijos creyentes, no acusados de disolución, ni contumaces.
Si alguno piensa que es religioso, y no refrena su lengua, antes engaña su corazón, la religión del tal hombre es vana.
¶Hijitos, es ya la hora postrera; y según habéis oído decir que viene el anticristo, aun ahora se han levantado muchos anticristos; de donde sabemos que es la hora postrera.
El que dice: Yo le conozco, y no guarda sus mandamientos, es mentiroso, y no hay verdad en él;
AMADOS míos, no creáis a todo espíritu, sino probad los espíritus si son de Dios; porque muchos falsos profetas han salido por el mundo.
Esto no obstante, yo tengo algunas pocas cosas contra ti, por cuanto tienes allí a los que sostienen la enseñanza de Balaam, el cual enseñó a Balac a poner tropiezo delante de los hijos de Israel, incitándolos a comer de lo que se ofrece en sacrificio a los ídolos, y a cometer fornicación.
Empero tú tienes esto, que aborreces las obras de los nicolaítas, que yo también aborrezco.