Proverbios 9:10 - Biblia Version Moderna (1929) El principio de la sabiduría es el temor de Jehová, y el conocimiento del Santísimo es la inteligencia. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 El temor de Jehová es el principio de la sabiduría, Y el conocimiento del Santísimo es la inteligencia. Biblia Nueva Traducción Viviente El temor del Señor es la base de la sabiduría. Conocer al Santo da por resultado el buen juicio. Biblia Católica (Latinoamericana) El temor de Yavé es el principio de la sabiduría; conocer Al, que es Santo, eso es inteligencia. La Biblia Textual 3a Edicion El temor de YHVH es el principio de la sabiduría, Y el conocimiento del Santísimo es la inteligencia. Biblia Serafín de Ausejo 1975 El principio de la sabiduría es el temor de Yahveh, y el conocimiento del Santo es inteligencia. Biblia Reina Valera Gómez (2023) El principio de la sabiduría es el temor de Jehová; y el conocimiento del Santo es el entendimiento. |
Y tú, Salomón, hijo mío, conoce al Dios de tu padre, y sírvele con sincero corazón, y con espíritu voluntario; porque Jehová escudriña todos los corazones, y entiende todas las imaginaciones de los pensamientos: ¡si le buscares, será hallado de ti; mas si le dejares, él te desechará para siempre!
y al hombre le dijo: ¡He aquí que el temor del Señor es la Sabiduría, y el apartarse del mal, la Inteligencia!
El temor de Jehová es el principio de la sabiduría: de buen entendimiento son todos los que hacen sus mandamientos: su alabanza dura para siempre.
¿Quién es el hombre que ama la vida, que desea muchos días en que vea el bien?
El temor de Jehová es el principio de la ciencia; los necios desprecian la sabiduría y la instrucción.
entonces entenderás el temor de Jehová, y hallarás el conocimiento de Dios.
Pues no he aprendido la sabiduría, y no he alcanzado el conocimiento del Santísimo.
¶Oigamos pues la conclusión de todo el asunto: Teme a Dios, y guarda sus mandamientos; porque esto es la suma del deber humano.
Todas las cosas me han sido entregadas por mi Padre; y nadie conoce al Hijo, sino el Padre; ni al Padre conoce nadie, sino el Hijo, y aquel a quien el Hijo lo quisiere revelar.
Y ésta es la vida eterna, que te conozcan a ti solo Dios verdadero, y a Jesucristo a quien tú enviaste.
Sabemos empero que el Hijo de Dios ha venido, y nos ha dado entendimiento, para que conozcamos a aquel que es verdadero; y nosotros estamos en el que es verdadero, es decir, en su Hijo Jesucristo. Éste es el verdadero Dios y la vida eterna.