¡Aleja de aquélla tu camino! ¡no te acerques a la entrada de su casa!
Aleja de ella tu camino, Y no te acerques a la puerta de su casa;
¡Aléjate de ella! ¡No te acerques a la puerta de su casa!
Que tu trayecto pase lejos de esa mujer, no te arriesgues a la entrada de su casa.
Aleja de ella tu camino, No te acerques a la puerta de su casa,
recorre lejos de ella tu camino, no te acerques a la puerta de su casa,
Aleja de ella tu camino, y no te acerques a la puerta de su casa;
No entres eh el sendero de los inicuos, ni andes por el camino de los hombres malos
¡evítalo, no pases por él, apártate de él, y pasa adelante!
no sea que entregues tu honra a otros, y tus años al cruel;
¡No se desvíe tu corazón hacia el camino de aquélla, no te extravíes, andando en sus senderos!
Iba éste pasando por la calle, junto a la esquina de aquélla, y seguía el camino de su casa;
Pues se sienta a la entrada de su casa, o sobre un asiento en los lugares altos de la ciudad,
Y no nos dejes caer en tentación, mas líbranos del mal. Porque tuyo es el reino, y el poder, y la gloria, para siempre. Amén.
y no teniendo comunión con las obras infructuosas de las tinieblas, mas antes reprendiéndolas;