Hombres soberbios han escondido para mí lazos y cuerdas; han tendido una red junto al camino; me han puesto trampas. (Pausa.)
Proverbios 24:15 - Biblia Version Moderna (1929) ¡No pongas asechanzas, oh hombre inicuo, contra la habitación del justo; no asueles su lugar de descanso! Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Oh impío, no aceches la tienda del justo, No saquees su cámara; Biblia Nueva Traducción Viviente No estés al acecho frente a la casa del justo ni ataques el lugar donde vive. Biblia Católica (Latinoamericana) ¡Malvado, déjate de tramar algo malo en contra de la casa del justo; no vayas a perturbar su descanso!' La Biblia Textual 3a Edicion ¡Oh impío!, no aceches la tienda del justo, Ni saquees su recámara, Biblia Serafín de Ausejo 1975 No aceches, impío, la casa del justo, no destruyas su morada; Biblia Reina Valera Gómez (2023) Oh impío, no aceches la tienda del justo, no saquees su cámara; |
Hombres soberbios han escondido para mí lazos y cuerdas; han tendido una red junto al camino; me han puesto trampas. (Pausa.)
Se reunen en tropas, se esconden; miran atentamente mis pasos, como que ponen asechanzas a mi vida.
Pues he aquí que ponen asechanzas a mi vida; hanse juntado contra mí poderosos; no por mi transgresión, ni por mi pecado ¡oh Jehová!
Si dijeren: Ven tú con nosotros; pongamos asechanzas pana derramar sangre; escondamos lazos, sin motivo, para el inocente;
Y mi pueblo habitará en mansión de paz, en moradas seguras, en descansaderos tranquilos.
Mas era yo como un manso cordero que es llevado al matadero; y no sabía que contra mí tramaban enredos, diciendo: Destruyamos el árbol con su fruto, y cortémosle de la tierra de los vivientes, para que no haya más memoria de su nombre.
y consultaron entre sí, con el fin de prender a Jesús con artificio, y hacerle morir.
¶Empero el hijo de la hermana de Pablo, teniendo noticia de la emboscada, fué, y entrando en la fortaleza, se lo dijo a Pablo.
pidiendo para sí favor contra él, que le hiciese venir a Jerusalem; poniéndole ellos emboscada para matarle en el camino.
pero su trama vino en conocimiento de Saulo. Y aun velaban las puertas, día y noche, para matarle.
Iban ellos subiendo la cuesta hacia la ciudad, cuando se encontraron con unas muchachas que salían a sacar agua, y les dijeron: ¿Está aquí el vidente?