Puede ser que mire Jehová el agravio que se me hace, y que me devuelva Jehová el bien en lugar de sus maldiciones de hoy.
Proverbios 20:22 - Biblia Version Moderna (1929) No digas: Yo mismo vengaré el agravio: espera a Jehová, y él te salvará. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 No digas: Yo me vengaré; Espera a Jehová, y él te salvará. Biblia Nueva Traducción Viviente No digas: «Me voy a vengar de este mal»; espera a que el Señor se ocupe del asunto. Biblia Católica (Latinoamericana) No digas: '¡Me vengaré!', confía en Yavé para resarcirte. La Biblia Textual 3a Edicion No digas: yo me vengaré, Espera a YHVH, y Él te salvará. Biblia Serafín de Ausejo 1975 No digas: 'Pagaré mal con mal'; confía en Yahveh, y él te ayudará. Biblia Reina Valera Gómez (2023) No digas: Yo me vengaré; espera en Jehová, y Él te salvará. |
Puede ser que mire Jehová el agravio que se me hace, y que me devuelva Jehová el bien en lugar de sus maldiciones de hoy.
¡Espera a Jehová! ¡anímate, y sea esforzado tu corazón; y espera a Jehová!
Espera a Jehová, y guarda su camino, y él te ensalzará a heredar la tierra: cuando los malos son cortados, tú lo verás.
Y Jehová los ha ayudado, y los ha librado; él también los librará de los inicuos, y los salvará de todo mal, por cuanto han puesto su confianza en él.
Aquel que devuelve el mal por el bien, de su casa nunca se apartará el mal.
La sensatez de un hombre hace que sea tardo en airarse; y es su gloria sobrellevar el agravio.
La herencia que se adquiere con rapacidad en un principio, no será bendita en su fin.
No digas: Según hizo conmigo, así le tratare a él; pagaré al hombre conforme a su obra.
Pero los que esperan a Jehová adquirirán nuevas fuerzas; se remontarán con alas, como águilas; correrán, y no se cansarán; caminarán, y no desfallecerán.
¶No te vengarás, ni guardarás rencor contra los hijos de tu pueblo; sino que amarás a tu prójimo como a ti mismo. Yo Jehová.
Mas yo os digo, que no hagáis resistencia al agravio; sino antes, si alguno te hiriere en la mejilla derecha, vuélvele también la otra.
Mía es la venganza y la retribución; al debido tiempo resbalará su pie; porque se acerca el día de su calamidad, y se apresuran los males preparados para ellos.
Ved que nadie recompense el mal con el mal; mas seguid siempre lo que es bueno el uno para con el otro, y para con todos.
quien, cuando fué ultrajado, no volvió a ultrajar; cuando padeció, no usó de amenazas, sino que remitió su causa a aquel que juzga justamente;
no volviendo mal por mal, ni ultraje por ultraje, sino al contrario, bendiciendo a vuestros enemigos; porque para esto mismo fuisteis llamados, para que heredaseis bendición.
Por lo cual, también los que sufren conforme a la voluntad de Dios, encomienden sus almas a su fiel Creador, obrando ellos lo que es bueno.
Entonces dijo David a sus hombres: ¡Ceñid cada uno su espada! Y se ciñeron cada uno su espada, ciñéndose también David su espada: y subieron tras David como cuatrocientos hombres, quedándose doscientos con el bagaje.