Dijo el Dios de Israel, me habló la Roca de Israel, diciendo: El que gobierna entre los hombres debe ser justo, gobernando en el temor de Dios.
Proverbios 17:7 - Biblia Version Moderna (1929) Al insensato no le está bien una lengua facunda; ni menos al príncipe una lengua mentirosa. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 No conviene al necio la altilocuencia; ¡Cuánto menos al príncipe el labio mentiroso! Biblia Nueva Traducción Viviente Las palabras elocuentes no son apropiadas para el necio, mucho menos las mentiras para el gobernante. Biblia Católica (Latinoamericana) Un lenguaje noble no le cae bien a un tonto, y menos aún la mentira a un príncipe. La Biblia Textual 3a Edicion No conviene al necio la grandilocuencia°, ¡Cuánto menos al príncipe el labio mentiroso! Biblia Serafín de Ausejo 1975 El lenguaje exquisito no va con el necio; menos aún el lenguaje falso con el príncipe. Biblia Reina Valera Gómez (2023) No conviene al necio la palabra elocuente: ¡Cuánto menos al príncipe el labio mentiroso! |
Dijo el Dios de Israel, me habló la Roca de Israel, diciendo: El que gobierna entre los hombres debe ser justo, gobernando en el temor de Dios.
Y ciertamente Dios no hará maldad, ni el Todopoderoso pervertirá la justicia.
¡Enmudezcan los labios mentirosos, que hablan contra el justo insolencias, con soberbia y desprecio!
Los labios veraces permanecerán estables para siempre; mas sólo por un momento la lengua mentirosa.
Abominación a Jehová son los labios mentirosos; pero los que obran con honradez son su deleite.
La vida regalada no está bien al insensato; mucho menos al siervo tener dominio sobre príncipes.
Cosa demasiado alta para el necio es la sabiduría: en el tribunal no abre su boca.
COMO la nieve en el verano, y como la lluvia en la siega, así tampoco le conviene al insensato la honra.
Las piernas del cojo penden inútiles; así es una sentencia sabia en boca de los insensatos.
Cuando un gobernante atiende a las palabras mentirosas, todos sus servidores vienen a ser inicuos.
Los ojos altivos, la lengua mentirosa, y las manos que derraman la sangre inocente;
¡Hipócrita! echa fuera primero la viga de tu ojo, y entonces verás claramente para echar fuera la paja del ojo de tu hermano.