Manantial de vida es la boca del justo; pero la boca de los inicuos encubre la violencia.
Proverbios 16:22 - Biblia Version Moderna (1929) La inteligencia es fuente de vida al que la tiene; mas la corrección de los insensatos es su misma insensatez. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Manantial de vida es el entendimiento al que lo posee; Mas la erudición de los necios es necedad. Biblia Nueva Traducción Viviente La discreción es fuente que da vida para quienes la poseen, pero la disciplina se desperdicia en los necios. Biblia Católica (Latinoamericana) El buen criterio es fuente de vida para el que lo posee, la estupidez de los tontos será su castigo. La Biblia Textual 3a Edicion Manantial de vida es la sensatez para el que la posee, Pero la erudición de los necios es necedad. Biblia Serafín de Ausejo 1975 La prudencia es fuente de vida en quien la posee; el castigo de los necios es su necedad. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Manantial de vida es el entendimiento al que lo posee; mas la instrucción de los necios es necedad. |
Manantial de vida es la boca del justo; pero la boca de los inicuos encubre la violencia.
La enseñanza del sabio es manantial de vida, para apartarse de los lazos de la muerte.
El temor de Jehová es fuente de vida, para que uno se aleje de los lazos de la muerte.
La lengua de los sabios hace que sea grata la ciencia; pero la boca de los insensatos rebosará en necedades.
El corazón del justo medita para dar respuesta; pero la boca de los inicuos rebosa en cosas malas.
El sabio de corazón será llamado entendido; y la dulzura de los labios aumenta el saber
Aguas profundas son palabras de la boca del hombre sabio; el manantial de sabiduría es como un arroyo abundoso.
La boca del insensato es su misma perdición; y sus labios son un lazo para su alma.
Dejadlos: son ciegos, guías de ciegos; y si el ciego guiare al ciego, ambos caerán en el hoyo.
En verdad, en verdad os digo, que quien oye mi palabra, y cree a aquel que me envió, tiene vida eterna, y no entra en condenación, sino que ha pasado ya de muerte a vida.
Es el espíritu el que da vida, la carne de nada aprovecha: las palabras que yo os he hablado espíritu y vida son.
Respondióle Simón Pedro: Señor, ¿a quién iremos? ¡tú tienes las palabras de vida eterna: