Proverbios 1:22 - Biblia Version Moderna (1929) ¿Hasta cuándo, oh simples, amaréis la simpleza? ¿y hasta cuándo se deleitarán los escarnecedores en escarnecer, y los insensatos aborrecerán la ciencia? Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 ¿Hasta cuándo, oh simples, amaréis la simpleza, Y los burladores desearán el burlar, Y los insensatos aborrecerán la ciencia? Biblia Nueva Traducción Viviente «Simplones, ¿hasta cuándo insistirán en su ignorancia? Burlones, ¿hasta cuándo disfrutarán de sus burlas? Necios, ¿hasta cuándo odiarán el saber? Biblia Católica (Latinoamericana) ¿Por cuánto tiempo más, gente insignificante, preferirán sus estupideces? ¿Hasta cuándo los burlones se entretendrán con sus mofas y la gente estúpida se negará a saber? La Biblia Textual 3a Edicion Oh simples ¿hasta cuándo amaréis la simpleza, Y vosotros, insolentes, os complaceréis en la insolencia, Y vosotros, insensatos, aborreceréis el saber? Biblia Serafín de Ausejo 1975 ¿Hasta cuándo, inexpertos, amaréis la inexperiencia, vosotros, insolentes gozaréis con la insolencia, y los necios a la ciencia tendréis odio? Biblia Reina Valera Gómez (2023) ¿Hasta cuándo, oh simples, amaréis la simpleza, y los burladores desearán el burlar, y los insensatos aborrecerán el conocimiento? |
BIENAVENTURADO el hombre que no anda en el consejo de los inicuos, ni se detiene en el camino de los pecadores, ni se sienta en el banco de los escarnecedores;
¡Entended vosotros, los más estúpidos de entre el pueblo! y vosotros, ¡oh insensatos! ¿cuándo tendréis cordura?
¶Por lo cual entraron Moisés y Aarón a donde estaba Faraón, y le dijeron: Así dice Jehová, el Dios de los Hebreos: ¿Hasta cuándo rehusarás humillarte delante de mí? Deja ir a mi pueblo, para que ellos me sirvan.
Dijo pues Jehová a Moisés: ¿Hasta cuándo rehusaréis guardar mis mandamientos y mis leyes?
clama en las encrucijadas de las calles concurridas; a la entrada de las puertas, y por toda la ciudad profiere sus palabras:
Por cuanto aborrecieron la ciencia, y no escogieron el temor de Jehová;
Porque la apostasía de los simples los matará, y la prosperidad de los insensatos causará su perdición.
para comunicar cordura a los simples, y al joven, ciencia y discreción:
El temor de Jehová es el principio de la ciencia; los necios desprecian la sabiduría y la instrucción.
El escarnecedor busca la sabiduría, y no la halla; pero la ciencia es fácil al hombre de entendimiento.
El escarnecedor no ama al que le reprende; no quiere acercarse a los sabios.
Castigos están aparejados para los mofadores, y azotes para las espaldas de los insensatos.
Cuando es castigado el escarnecedor, el simple se hace avisado; y cuando se enseña al sabio, éste aprende la ciencia.
En cuanto al presumido y altanero, escarnecedor es su nombre; obra en la insolencia de su presunción.
El prudente prevé el mal, y se esconde; mas los simples pasan adelante, y llevan el daño.
Indudablemente el escarnece a los escarnecedores, mas da gracia a los humildes.
y digas: ¡Cómo aborrecí la instrucción, y mi corazón rehusó la corrección;
¿Hasta cuándo, oh perezoso, te estarás acostado? ¿cuándo te levantarás de tu sueño?
cuando ví entre los simples, advertí entre los mancebos, a un joven falto de entendimiento.
¡Entended, oh simples, la cordura, y vosotros, oh insensatos, sed de inteligente corazón!
Tus adulterios, y tus relinchos, y tu execrable fornicación, sobre los collados y por los campos, todas tus abominaciones las he visto yo. ¡Ay de ti, oh Jerusalem; tú no quieres que se te haga limpia! ¿después de cuánto tiempo aún, ha de ser así?
¡Lava tu corazón de maldad, oh Jerusalem, para que seas salva! ¿hasta cuándo se aposentarán tus malos pensamientos dentro de ti?
¿Hasta cuándo tengo de sufrir a esta Congregación perversa, que sigue murmurando contra mí? Yo he oído las murmuraciones que los hijos de Israel profieren contra mí.
Y Jesús respondiendo, dijo: ¡Oh generación incrédula y perversa! ¿hasta cuándo he de estar con vosotros? ¿hasta cuándo os tengo de sufrir? ¡Traédmele acá!
¡Jerusalem! ¡Jerusalem! que matas a los profetas, y apedreas a los que son enviados a ti, ¡cuántas veces quise recoger a tus hijos, como la gallina recoge sus polluelos debajo de las alas, y no quisiste!
Id, pues, y aprended qué significa esto: Deseo la misericordia, y no el sacrificio; porque no vine a llamar justos, sino pecadores.
diciendo: ¡Oh si hubieras conocido, tú, siquiera en este tu día, las cosas que hacen a tu paz! ¡mas ahora están encubiertas de tus ojos!
Porque todo aquel que obra el mal, odia la luz, y no viene a la luz, para que sus obras no sean reprendidas.
sabiendo esto primeramente: que en los postreros días vendrán escarnecedores, con sus escarnios, andando según sus mismas concupiscencias,
¶Y el Espíritu y la esposa dicen ¡Ven! y el que oye, diga: ¡Ven! y el que tiene sed, ¡venga! ¡y el que quiera, tome del agua de la vida, de balde!