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Oseas 6:8 - Biblia Version Moderna (1929)

Galaad es una ciudad de obradores de iniquidad; está llena de huellas ensangrentadas.

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Biblia Reina Valera 1960

Galaad, ciudad de hacedores de iniquidad, manchada de sangre.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

»Galaad es una ciudad de pecadores, marcada con huellas de sangre.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

Galaad, ciudad de malhechores, está llena de huellas de sangre.

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La Biblia Textual 3a Edicion

Galaad es una villa de malhechores, Llena de huellas de sangre.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

Galaad es ciudad de malhechores, manchada con huellas de sangre.

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

Galaad, ciudad de obradores de iniquidad, ensuciada de sangre.

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Oseas 6:8
17 Tagairtí Cros  

Ellos estaban junto a la piedra grande que había en Gabaón, cuando se les presentó Amasa, que venía al encuentro de ellos. Y Joab tenía ceñida su ropa, su vestido de ordinario, y sobre ella el cinto de una espada que traía ajustada a sus lomos, en su vaina; y mientras él avanzaba, ella se le cayó.


Volvió pues Abner a Hebrón; y Joab le llamó aparte en medio de la puerta para hablar con él privadamente: e hirióle allí en el vientre, de modo que murió, por la sangre de Asael su hermano.


¶Y tú también sabes lo que me ha hecho Joab, hijo de Sarvia, y lo que hizo a dos jefes del ejército de Israel, es decir, a Abner hijo de Ner, y a Amasa hijo de Jeter, a quienes él mató, derramando sangre de guerra en tiempo de paz, y poniendo sangre de guerra en el talabarte que traía sobre sus lomos, y en los zapatos que tenía en sus pies.


Se sienta en los escondites de las aldeas; en los escondrijos mata al inocente; sus ojos están espiando al desvalido.


¡No dejes inclinar mi corazón a cosa mala, a hacer maldades con los obradores de iniquidad; ni coma yo de sus delicias!


¡Líbrame de los obradores de iniquidad! ¡sálvame de los hombres sanguinarios!


Sus telas nunca llegarán a ser vestidos, ni ellos podrán cubrirse con sus obras; sus obras son obras de iniquidad, y actos de violencia están en sus manos.


Mas era yo como un manso cordero que es llevado al matadero; y no sabía que contra mí tramaban enredos, diciendo: Destruyamos el árbol con su fruto, y cortémosle de la tierra de los vivientes, para que no haya más memoria de su nombre.


¿Será que Galaad es iniquidad? Ciertamente ellos se han hecho vanidad; en Gilgal sacrifican novillos, y sus altares son como montones de piedras en los surcos del campo.


Mas Jacob huyó al país de la Siria, e Israel se hizo siervo para adquirir mujer; sí, para adquirir mujer guardó ovejas.


¡No hay más que perjurio, y mala fe, y homicidio, y hurto y adulterio! ¡rompen por todo; y un charco de sangre toca a otro!


¡OÍD esto, oh sacerdotes! ¡escuchad también, los de la casa de Israel; y los de la casa del rey, prestad oído; porque este juicio es para vosotros! puesto que vosotros habéis sido un lazo en Mizpa, y una red tendida sobre el Tabor.


El hombre piadoso perecido ha de la tierra, y no hay ya recto entre los hombres; todos ellos ponen asechanzas para derramar la sangre, cazan cada cual a su hermano con una red;


pidiendo para sí favor contra él, que le hiciese venir a Jerusalem; poniéndole ellos emboscada para matarle en el camino.


De la tribu de Gad, la ciudad de refugio para los homicidas, Ramot en Galaad con sus ejidos, y Mahanaim con sus ejidos,