¡He aquí que me arrojas hoy de sobre la faz de la tierra, y de tu presencia me esconderé; y seré fugitivo y errante en la tierra; y va a suceder que cualquiera que me hallare me matará.
Números 35:21 - Biblia Version Moderna (1929) será muerto irremisiblemente aquel que le dió el golpe; homicida es; el vengador de la sangre, al encontrarle, hará morir al homicida. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 o por enemistad lo hirió con su mano, y murió, el heridor morirá; es homicida; el vengador de la sangre matará al homicida cuando lo encontrare. Biblia Nueva Traducción Viviente O si alguien por odio golpea a otro con su puño y esa persona muere, comete homicidio. En tales casos, el vengador tiene que quitarle la vida al asesino cuando se encuentren. Biblia Católica (Latinoamericana) o si, por maldad, lo ha golpeado con las manos causándole la muerte, es un asesino y debe morir. El vengador de la sangre dará muerte al asesino en cuanto lo encuentre. La Biblia Textual 3a Edicion o si por enemistad lo golpea con el puño y muere, el agresor será muerto sin remisión. Es asesino, y el vengador de la sangre matará al asesino cuando lo encuentre. Biblia Serafín de Ausejo 1975 o si por enemistad le golpea con la mano, y de hecho éste muere, el que lo hirió debe morir; es un homicida. El vengador de sangre matará al homicida cuando le encuentre. Biblia Reina Valera Gómez (2023) o por enemistad lo hirió con su mano, y murió; el heridor morirá; es homicida; el vengador de la sangre matará al homicida cuando lo encontrare. |
¡He aquí que me arrojas hoy de sobre la faz de la tierra, y de tu presencia me esconderé; y seré fugitivo y errante en la tierra; y va a suceder que cualquiera que me hallare me matará.
Y ciertamente pediré cuenta de vuestra sangre, la sangre de vuestras vidas: de mano de todo animal pediré cuenta de ella, y de mano de hombre; de mano de cada hermano del hombre pediré cuenta de la vida del hombre.
A lo que dijo ella: Ruégote se acuerde el rey de Jehová su Dios, para estorbar que haga más estrago el vengador de la sangre; no sea que se destruya a mi hijo. Dijo entonces el rey: ¡Vive Jehová, que ni un cabello de tu hijo caerá a tierra!
y te juzgaré conforme al juicio de las adúlteras, y de las que derraman la sangre; y te pondré por ejemplo sangriento de furor y de celos.
El mismo vengador de la sangre dará muerte al homicida; dondequiera que le encontrare, le dará muerte.
También si con odio le hubiere empujado, o hubiere echado algo sobre él, de modo que muera,
Mas si por accidente, sin enemistad, le hubiere empujado, o echado sin intento sobre cualquiera cosa;