porque toda la tierra que ves, te la daré a ti y a tu simiente, para siempre.
Números 11:12 - Biblia Version Moderna (1929) ¿Acaso he concebido yo a todo este pueblo, y le he dado yo a luz, para que tú me digas: Llévalos en tu seno, como suele llevar la nodriza al niño de pecho, a la tierra que prometí con juramento a sus padres? Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 ¿Concebí yo a todo este pueblo? ¿Lo engendré yo, para que me digas: Llévalo en tu seno, como lleva la que cría al que mama, a la tierra de la cual juraste a sus padres? Biblia Nueva Traducción Viviente ¿Acaso yo los engendré? ¿Los traje yo al mundo? ¿Por qué me dijiste que los llevara en mis brazos como una madre a un bebé de pecho? ¿Cómo puedo llevarlos a la tierra que juraste dar a sus antepasados? Biblia Católica (Latinoamericana) ¿Soy yo acaso quien lo dio a luz para que me digas: Llévalo en tu seno, como la nodriza lleva a su bebé, al país que prometiste bajo juramento a nuestros padres? La Biblia Textual 3a Edicion ¿Acaso concebí yo a todo este pueblo o lo engendré, para que me digas: Cárgalo en tu pecho, como una nodriza lleva al que mama, a la tierra que prometiste con juramento a sus padres? Biblia Serafín de Ausejo 1975 ¿Acaso he sido yo quien ha concebido a todo este pueblo? ¿Soy yo quien lo ha dado a luz, para que me digas: 'Llévalo en tu regazo', como lleva la nodriza al niño de pecho, hasta el país que juraste dar a sus padres? Biblia Reina Valera Gómez (2023) ¿Concebí yo a todo este pueblo? ¿Lo engendré yo, para que me digas: Llévalo en tu seno, como lleva la que cría al que mama, a la tierra de la cual juraste a sus padres? |
porque toda la tierra que ves, te la daré a ti y a tu simiente, para siempre.
Jehová, el Dios del cielo, que me tomó de la casa de mi padre y de la tierra de mi nacimiento, y que me habló y me juró, diciendo: A tu simiente daré esta tierra; él enviará su ángel delante de ti, de modo que puedas tomar de allí mujer para mi hijo.
habita temporalmente en esta tierra, y estaré yo contigo y te bendeciré; porque a ti y a tu simiente daré todas estas tierras, y estableceré contigo el juramento que juré a Abraham tu padre;
Y José dijo a sus hermanos: Yo me muero; mas Dios de seguro os visitará, y os hará subir de esta tierra a la tierra que tiene jurada a Abraham, a Isaac y a Jacob.
Y ACAB tenía setenta hijos en Samaria. Jehú pues escribió cartas, y las envió a Samaria, a los príncipes de Jezreel, a los ancianos, y a los ayos de los hijos de Acab, diciendo:
Por lo cual el mayordomo de palacio y los magistrados de la ciudad, con los ancianos y los ayos, enviaron a decir a Jehú: Siervos tuyos somos, y todo lo que mandares haremos; no queremos hacer rey a ninguno; haz lo que bien te pareciere.
¶Y será así, que cuando te haya conducido Jehová a la tierra del Cananeo, como lo tiene jurado a ti y a tus padres, y te la haya dado,
Y será que cuando te hubiere llevado Jehová a la tierra del Cananeo, y del Heteo, y del Amorreo, y del Heveo, y del Jebuseo, respecto de la cual juró a Abraham que te la daría, tierra que mana leche y miel, celebrarás este culto en este mes.
DIJO pues Jehová a Moisés: Anda, sube de aquí, tú y el pueblo que hiciste subir de Egipto, a la tierra de que juré a Abraham, a Isaac y a Jacob, diciendo: A tu simiente se la daré:
Os traeré también a la tierra acerca de la cual alcé mi mano jurando dársela a Abraham, a Isaac y a Jacob; y os la daré a vosotros en posesión. Yo Jehová.
Como pastor, apacentará su grey; en su brazo recogerá los corderitos, y los llevará en su seno, y conducirá suavemente a las recién paridas.
¿Se olvidará acaso la mujer de su niño mamante, de modo que no tenga compasión del hijo de sus entrañas? ¡Aun las tales le pueden olvidar; mas no me olvidaré yo de ti!
Y reyes serán tus padres adoptivos, y sus reinas tus amas de leche; rostro a tierra, tus enemigos se inclinarán ante ti, y lamerán el polvo de tus pies; y tú conocerás que yo soy Jehová; pues no serán avergonzados los que me esperan.
Y levantaré sobre ellas UN SOLO PASTOR, para que él las pastoree, es a saber, mi siervo David; él las apacentará, y será su Pastor.
Pues aunque tuvierais diez mil ayos en Cristo, sin embargo no tenéis muchos padres; porque en Cristo Jesús, por medio del evangelio yo os engendré.
Hijitos míos, por quienes estoy otra vez en dolores de parto, hasta que Cristo sea formado en vosotros,
y también en el desierto, donde habéis visto cómo Jehová vuestro Dios os llevó, cual lleva un hombre a su propio hijo, en todo el camino que anduvisteis hasta vuestra llegada a este lugar.
Al contrario, éramos mansos en medio de vosotros, como cuando una nodriza acaricia a sus propios hijos: