¡Levántate, oh Jehová! ¡oh Dios, alza tu mano! ¡no te olvides de los afligidos!
Miqueas 5:9 - Biblia Version Moderna (1929) Tu mano será ensalzada sobre tus adversarios, y todos tus enemigos serán destruídos. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Tu mano se alzará sobre tus enemigos, y todos tus adversarios serán destruidos. Biblia Nueva Traducción Viviente La gente de Israel enfrentará a sus adversarios, y todos sus enemigos serán aniquilados. Biblia Católica (Latinoamericana) Aquel día, dice Yavé, te sacaré tus caballos y destruiré tus carros, La Biblia Textual 3a Edicion ¡Alza tu mano contra tus adversarios, Y todos tus enemigos serán destruidos! Biblia Serafín de Ausejo 1975 Aquel día -oráculo de Yahveh-: aniquilaré tus caballos de en medio de ti y destruiré tus carros; Biblia Reina Valera Gómez (2023) Tu mano se alzará sobre tus adversarios, y todos tus enemigos serán cortados. |
¡Levántate, oh Jehová! ¡oh Dios, alza tu mano! ¡no te olvides de los afligidos!
Por tanto les alzó su mano, jurando que los haría caer en el desierto;
Alcanzará tu mano a todos tus enemigos; tu diestra alcanzará a los que te aborrecen.
y volveré mi mano sobre ti, y limpiaré enteramente tus escorias, y quitaré todo tu estaño;
Antes bien, volarán los dos sobre el costado de los Filisteos, de la parte del occidente, y juntos despojarán a los hijos de Oriente: sobre Edom y Moab extenderán la mano; y los hijos de Ammón los obedecerán.
Jehová, tu mano está alzada, mas ellos no ven: verán empero con vergüenza tu celo por tu pueblo; y el fuego devorará a tus contrarios.
¡Ahora me levantaré, dice Jehová, ahora me ensalzaré, ahora me glorificaré!
En efecto, salió el ángel de Jehová, e hirió en el campamento de los Asirios ciento ochenta y cinco mil hombres; y cuando se levantaron por la mañana los que sobrevivieron, he aquí que todos ellos eran cuerpos muertos.
y trastornaré el trono de los reinos, y destruiré la potencia de los reinos de las naciones, y volcaré los carros de guerra y los que van en ellos; y caerán los caballos y sus jinetes, cada uno bajo la espada de su hermano.
Y yo cortaré de en medio de Efraim el carro de guerra, y el caballo de en medio de Jerusalem, y será destruido el arco de batalla; porque él hablará paz a las naciones; y tendrá dominio de mar a mar, y del río hasta los cabos de la tierra.
Empero en cuanto a aquellos mis enemigos, que no querían que yo reinase sobre ellos, traedlos acá, y degolladlos delante de mí.
Porque es menester que él reine, hasta que ponga a sus enemigos debajo de sus pies.