Yo sé que cuanto hace Dios es lo que para siempre será; nada se le puede añadir, ni nada se le puede quitar; y Dios lo ha hecho así, para que los hombres teman delante de él.
Mateo 6:27 - Biblia Version Moderna (1929) ¿Y quién de vosotros, por mucho que se afane, podrá añadir un codo a lo largo de su vida? Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 ¿Y quién de vosotros podrá, por mucho que se afane, añadir a su estatura un codo? Biblia Nueva Traducción Viviente ¿Acaso con todas sus preocupaciones pueden añadir un solo momento a su vida? Biblia Católica (Latinoamericana) ¿Quién de ustedes, por más que se preocupe, puede añadir algo a su estatura? La Biblia Textual 3a Edicion Y ¿quién de vosotros puede, aun afanándose, añadir a su estatura un solo codo?° Biblia Serafín de Ausejo 1975 ¿Quién de vosotros, por mucho que se afane, puede añadir una sola hora a su existencia? Biblia Reina Valera Gómez (2023) ¿Y quién de vosotros podrá, por mucho que se afane, añadir a su estatura un codo? |
Yo sé que cuanto hace Dios es lo que para siempre será; nada se le puede añadir, ni nada se le puede quitar; y Dios lo ha hecho así, para que los hombres teman delante de él.
ni por tu cabeza jurarás, porque no puedes hacer un solo cabello blanco o negro.
¶Por tanto os digo: No os afanéis por vuestra vida, sobre lo que habéis de comer, o lo que habéis de beber; ni tampoco por vuestro cuerpo, sobre lo que habéis de vestir. ¿La vida no es más que el alimento, y el cuerpo que el vestido?
Y en cuanto al vestido, ¿por qué os afanáis? Considerad los lirios del campo, cómo crecen: no trabajan, ni hilan;
Por tanto no os afanéis, diciendo: ¿Qué comeremos? ¿o qué beberemos? ¿o con qué nos vestiremos?
Por tanto no os afanéis por el día de mañana; que el día de mañana se afanará por las cosas de sí mismo. Le basta al día el mal suyo.
Pero Jesús respondiendo, le dijo: ¡Marta, Marta, cuidadosa estás, y te dejas turbar en cuanto a muchas cosas;
Y cuando os trajeren ante las sinagogas, y a los magistrados, y a las autoridades, no tengáis cuidado de cómo o de qué hayáis de responder, o de lo que hayáis de decir:
¶Y dijo a sus discípulos: Por tanto os digo: No os afanéis por vuestra vida, sobre lo que habéis de comer; ni por vuestro cuerpo, sobre lo que habéis de vestir.
Pero el caso es que Dios puso los miembros, cada uno de ellos, en el cuerpo, como él quiso.
No os afanéis por cosa alguna, sino que, en todas las circunstancias, por medio de la oración y la plegaria, con acciones de gracias, dense a conocer vuestras peticiones a Dios:
echando sobre él toda vuestra solicitud, porque él tiene cuidado de vosotros.