¡Enmiéndate, oh Jerusalem, no sea que mi alma se aparte de ti! ¡no sea que te haga una desolación, una tierra no habitada!
Mateo 21:17 - Biblia Version Moderna (1929) Y dejándolos, salió fuera de la ciudad, hasta Betania, y posó allí. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Y dejándolos, salió fuera de la ciudad, a Betania, y posó allí. Biblia Nueva Traducción Viviente Luego regresó a Betania, donde pasó la noche. Biblia Católica (Latinoamericana) En seguida Jesús los dejó y salió de la ciudad en dirección a Betania, donde pasó la noche. La Biblia Textual 3a Edicion Y dejándolos, salió fuera de la ciudad, a Betania, y pernoctó allí. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Y volviéndoles la espalda, salió fuera de la ciudad, a Betania, donde pasó la noche. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y dejándolos, salió fuera de la ciudad a Betania; y posó allí. |
¡Enmiéndate, oh Jerusalem, no sea que mi alma se aparte de ti! ¡no sea que te haga una desolación, una tierra no habitada!
Mas aun cuando criaren sus hijos, yo les privaré de hijos, hasta quedarse ellos sin gente; pues ¡ay también de ellos cuando yo los abandone!
Una generación mala y adúltera busca solícitamente una señal; y no le será dada señal alguna, sino la señal de Jonás. Y dejándolos, se fué.
Y CUANDO se iban acercando a Jerusalem, al llegar a Betfage y Betania, junto al Monte de los Olivos, Jesús envía dos de sus discípulos,
Y entró Jesús en Jerusalem, en el Templo; y habiéndolo reconocido todo en derredor, siendo ya tarde, salió hasta Betania con los doce.
¶Y estando él en Betania, en casa de Simón el leproso, mientras se recostaba a la mesa, vino una mujer, que tenía un frasco de alabastro de ungüento de nardo puro, de gran precio; y rompiendo el frasco, le derramó el ungüento sobre la cabeza.
¶Jesús, pues, con sus discípulos, se retiró al mar; y le siguió una inmensa multitud de Galilea, y de Judea.
¶Y mientras iban de camino, entró en cierta aldea; y cierta mujer, llamada Marta, le recibió en su casa.
Y sucedió que al llegar cerca de Betfage y Betania, junto al monte que se llama del Olivar, envió a dos de los discípulos,
¶Y los condujo fuera de la ciudad hasta enfrente de Betania; y alzando las manos, los bendijo.
ESTABA enfermo cierto hombre, llamado Lázaro, de Betania, la aldea de María y de Marta su hermana.
Y Betania estaba cerca de Jerusalem, distante apenas como quince estadios;