indigno soy de todas las mercedes y de toda la fidelidad de que has usado para con tu siervo: porque con mi báculo pasé este Jordán, y ahora he venido a ser dos campamentos.
Mateo 15:27 - Biblia Version Moderna (1929) Y ella dijo: ¡Así es, Señor; mas óyeme,porque los perros también comen de las migajas que caen de la mesa de sus señores! Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Y ella dijo: Sí, Señor; pero aun los perrillos comen de las migajas que caen de la mesa de sus amos. Biblia Nueva Traducción Viviente —Es verdad, Señor —respondió la mujer—, pero hasta a los perros se les permite comer las sobras que caen bajo la mesa de sus amos. Biblia Católica (Latinoamericana) La mujer contestó: 'Es verdad, Señor, pero también los perritos comen las migajas que caen de la mesa de sus amos. La Biblia Textual 3a Edicion Pero ella dijo: Sí, Señor, pero aun los perros comen las migajas que caen de la mesa de sus amos. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Ella replicó: 'Es verdad, Señor; pero también los perrillos se comen las migajas que caen de la mesa de sus amos'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y ella dijo: Sí, Señor, mas los perrillos comen de las migajas que caen de la mesa de sus señores. |
indigno soy de todas las mercedes y de toda la fidelidad de que has usado para con tu siervo: porque con mi báculo pasé este Jordán, y ahora he venido a ser dos campamentos.
a fin de que te acuerdes, y te avergüences, y no vuelvas más a abrir tu boca a causa de tu confusión, cuando yo te haya perdonado respecto de todo lo que has hecho, dice Jehová el Señor.
¡Inclina, oh Dios mío, tu oído, y oye; abre tus ojos, y ve las desolaciones nuestras, y a la ciudad que es llamada de tu nombre; porque no derramamos nuestros ruegos ante tu rostro a causa de nuestras justicias, sino a causa de tus grandes compasiones!
Mas él respondió y dijo: No es justo tomar el pan de los hijos, y echarlo a los perros.
Entonces Jesús respondiendo, le dijo: ¡Oh mujer, grande es tu fe; sea hecho contigo como quieres! Y su hija quedó sana desde aquella hora.
de modo que seáis hijos de vuestro Padre que está en los cielos; pues él hace que su sol se levante sobre malos y buenos, y hace llover sobre justos e injustos.
Mas el centurión respondiendo, dijo: Señor, no soy digno de que entres debajo de mi techado: pero di solamente una palabra, y mi criado quedará sano:
Ella empero respondió y le dijo: ¡Así es, Señor; pero los perros también, debajo de la mesa, comen de las migajas de los hijos!
y que deseaba saciarse de las migajas que caían de la mesa del rico; y hasta los perros venían y le lamían las llagas.
Mas el publicano, estando en pie allá lejos, no quería ni aun alzar los ojos al cielo; sino que se daba golpes de pecho, diciendo: ¡Dios, ten misericordia de mí, pecador!
Pues no hay distinción entre judío y griego; puesto que uno mismo es el Señor de todos, rico para con todos los que le invocan:
¶Mas sabemos que cuanto dice la ley, ella lo dice a los que están bajo la ley, para que toda boca enmudezca, y el mundo todo se tenga por reo delante de Dios.
¿Es acaso él el Dios de los judíos solamente? ¿no lo es de los gentiles también? Sí, de los gentiles también;
¡No por cierto! ¡antes, sea Dios veraz, y todo hombre mentiroso! según está escrito:Para que seas justificado en tus dichos, y venzas cuando fueres juzgado.
y conocer el amor de Cristo, que sobrepuja a todo conocimiento; para que seáis llenos de ello, hasta la medida de toda la plenitud de Dios.
A mí, que soy el más ínfimo de todos los santos, ha sido dada esta gracia, el que predique entre las naciones las riquezas inescrutables de Cristo,