Acercándose entonces Jesús, les habló, diciendo: Toda potestad me es dada en el cielo y sobre la tierra.
Mateo 11:27 - Biblia Version Moderna (1929) Todas las cosas me han sido entregadas por mi Padre; y nadie conoce al Hijo, sino el Padre; ni al Padre conoce nadie, sino el Hijo, y aquel a quien el Hijo lo quisiere revelar. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Todas las cosas me fueron entregadas por mi Padre; y nadie conoce al Hijo, sino el Padre, ni al Padre conoce alguno, sino el Hijo, y aquel a quien el Hijo lo quiera revelar. Biblia Nueva Traducción Viviente »Mi Padre me ha confiado todo. Nadie conoce verdaderamente al Hijo excepto el Padre, y nadie conoce verdaderamente al Padre excepto el Hijo y aquellos a quienes el Hijo decide revelarlo». Biblia Católica (Latinoamericana) Nadie conoce al Hijo sino el Padre, y nadie conoce al Padre sino el Hijo y aquellos a quienes el Hijo se lo quiera dar a conocer. La Biblia Textual 3a Edicion Todas las cosas me fueron entregadas por mi Padre.° Nadie conoce plenamente al Hijo sino el Padre, y nadie conoce plenamente al Padre sino el Hijo,° y aquel a quien el Hijo lo quiera revelar. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Todo me lo ha confiado mi Padre. Y nadie conoce al Hijo sino el Padre, y nadie conoce al Padre sino el Hijo y aquel a quien el Hijo quiera revelárselo. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Todas las cosas me son entregadas por mi Padre; y nadie conoce al Hijo, sino el Padre, ni nadie conoce al Padre, sino el Hijo, y aquel a quien el Hijo lo quisiere revelar. |
Acercándose entonces Jesús, les habló, diciendo: Toda potestad me es dada en el cielo y sobre la tierra.
Todas las cosas me son entregadas por mi Padre; y nadie conoce quién es el Hijo, sino el Padre; ni quién es el Padre, sino el Hijo, y aquel a quien el Hijo lo quisiere revelar.
A Dios nadie jamás le ha visto: el Hijo unigénito, que está en el seno del Padre, él le ha dado a conocer.
Como el Padre me conoce a mí, así también yo conozco al Padre; y pongo mi vida por las ovejas.
conociendo Jesús que el Padre había entregado todas las cosas en sus manos, y que había venido de Dios, y estaba para ir a Dios,
He manifestado tu nombre a los hombres que me diste del mundo; tuyos eran, y a mí me los diste; y ellos han aguardado tu palabra.
No que hombre alguno haya visto al Padre, con excepción de aquel que es de Dios: éste ha visto al Padre.
el cual, habiendo ido al cielo, está a la diestra de Dios, estando sujetos a él ángeles y autoridades y potestades.
Cualquiera que niega al Hijo, ese no tiene al Padre: el que confiesa al Hijo, tiene al Padre también.
Todo aquel que pasa adelante, y no permanece en la enseñanza de Cristo, no tiene a Dios: el que permanece en la enseñanza, éste tal tiene al Padre y también al Hijo.