Y ellos, bien que oyeren, o bien que dejaren de oír (porque son una casa rebelde), sin embargo han de conocer que un profeta ha estado en medio de ellos.
Mateo 11:14 - Biblia Version Moderna (1929) Y si queréis recibirlo, éste es Elías, el que había de venir. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Y si queréis recibirlo, él es aquel Elías que había de venir. Biblia Nueva Traducción Viviente y si ustedes están dispuestos a aceptar lo que les digo, él es Elías, aquel que los profetas dijeron que vendría. Biblia Católica (Latinoamericana) Pero, si ustedes aceptan su mensaje, Juan es este Elías que había de venir. La Biblia Textual 3a Edicion y si queréis aceptarlo, él es Elías,° el que estaba a punto de venir.° Biblia Serafín de Ausejo 1975 Y si queréis aceptarlo, éste es Elías, el que tenía que venir. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y si queréis recibirlo, él es aquel Elías que había de venir. |
Y ellos, bien que oyeren, o bien que dejaren de oír (porque son una casa rebelde), sin embargo han de conocer que un profeta ha estado en medio de ellos.
HE aquí pues que voy a enviar mi mensajero, el cual preparará el camino delante de mí; y repentinamente vendrá a su Templo el Señor a quien buscáis; es decir, el Ángel del Pacto, en quien os deleitéis; he aquí que vendrá, dice Jehová de los Ejércitos.
He aquí que os voy a enviar a Elías profeta, antes que venga el día grande y tremendo de Jehová.
E irá delante de su faz, en el espíritu y poder de Elías, para hacer volver el corazón de los padres hacia los hijos, de los desobedientes también a la cordura de los justos; aparejando así un pueblo preparado para el Señor.
Tengo todavía muchas cosas que deciros, mas ahora no las podéis llevar.
Os alimenté con leche, no con manjar sólido; porque no erais capaces de ello; y ni aun todavía sois capaces;
¶Y ví tronos; y se sentaron sobre ellos; y les fué dada facultad de juicio: y ví las almas de los que habían sido degollados a causa del testimonio de Jesús, y a causa de la palabra de Dios, y cuantos no habían adorado a la bestia, ni a su imagen, y no habían recibido la marca en sus frentes ni sobre su mano; y vivieron, y reinaron con Cristo mil años.