Bíobla ar líne

Fógraí


An Bíobla ar fad Sean-Tiomna Tiomna Nua




Mateo 10:19 - Biblia Version Moderna (1929)

Pero cuando os entregaren, no os afanéis sobre cómo o qué habéis de decir; porque en aquella misma hora os será dado lo que habéis de decir;

Féach an chaibidil
Taispeáin Interlinear Bible

Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

Mas cuando os entreguen, no os preocupéis por cómo o qué hablaréis; porque en aquella hora os será dado lo que habéis de hablar.

Féach an chaibidil

Biblia Nueva Traducción Viviente

Cuando los arresten, no se preocupen por cómo responder o qué decir. Dios les dará las palabras apropiadas en el momento preciso.

Féach an chaibidil

Biblia Católica (Latinoamericana)

Cuando sean arrestados, no se preocupen por lo que van a decir, ni cómo han de hablar. Llegado ese momento, se les comunicará lo que tengan que decir.

Féach an chaibidil

La Biblia Textual 3a Edicion

Y cuando os entreguen, no os preocupéis de cómo o qué habéis de hablar, porque en esa hora os será dado lo que habéis de hablar,°

Féach an chaibidil

Biblia Serafín de Ausejo 1975

Pero, cuando os entreguen, no os preocupéis de cómo o qué habéis de decir, porque se os comunicará en aquel momento lo que habéis de decir,

Féach an chaibidil

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

Mas cuando os entregaren, no os preocupéis de cómo o qué habéis de hablar; porque en aquella misma hora, os será dado lo que habéis de hablar.

Féach an chaibidil
Aistriúcháin eile



Mateo 10:19
20 Tagairtí Cros  

Ahora pues, vé, que yo estaré con tu boca, y te enseñaré lo que has de decir.


Tú pues le hablarás a él, y pondrás las palabras en su boca; y yo estaré con tu boca y con su boca, y os enseñaré lo que habéis de hacer.


Y Jehová me respondió: No digas: Soy niño; sino anda a dondequiera que yo te envíe, y habla todo cuanto yo te diga.


Luego Jehová extendió la mano, y tocó mi boca; y me dijo Jehová: He aquí que pongo mis palabras en tu boca.


y seréis llevados ante gobernadores y reyes por mi causa, para testimonio a ellos y a las naciones.


¶Por tanto os digo: No os afanéis por vuestra vida, sobre lo que habéis de comer, o lo que habéis de beber; ni tampoco por vuestro cuerpo, sobre lo que habéis de vestir.  ¿La vida no es más que el alimento, y el cuerpo que el vestido?


Por tanto no os afanéis, diciendo: ¿Qué comeremos? ¿o qué beberemos? ¿o con qué nos vestiremos?


Por tanto no os afanéis por el día de mañana; que el día de mañana se afanará por las cosas de sí mismo.  Le basta al día el mal suyo.


Y cuando os trajeren ante las sinagogas, y a los magistrados, y a las autoridades, no tengáis cuidado de cómo o de qué hayáis de responder, o de lo que hayáis de decir:


porque el Espíritu Santo os enseñará en aquella misma hora lo que conviene decir.


Mas no podían contrarrestar la sabiduría y el espíritu con que hablaba.


No os afanéis por cosa alguna, sino que, en todas las circunstancias, por medio de la oración y la plegaria, con acciones de gracias, dense a conocer vuestras peticiones a Dios:


Mas el Señor estuvo conmigo, y me esforzó, para que por medio de mí la predicación fuese cumplidamente hecha, y para que oyesen todos los gentiles: y así yo fuí librado de la boca del león.


¶Empero si a cualquiera de vosotros le falta sabiduría, pídasela a Dios, el cual da con largueza a todos, y no zahiere; y le será dada.