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Lucas 24:49 - Biblia Version Moderna (1929)

Y he aquí que yo envío sobre vosotros la promesa de mi Padre; mas quedaos en la ciudad de Jerusalem hasta que seáis revestidos de poder desde lo alto.

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Biblia Reina Valera 1960

He aquí, yo enviaré la promesa de mi Padre sobre vosotros; pero quedaos vosotros en la ciudad de Jerusalén, hasta que seáis investidos de poder desde lo alto.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

»Ahora enviaré al Espíritu Santo, tal como prometió mi Padre; pero quédense aquí en la ciudad hasta que el Espíritu Santo venga y los llene con poder del cielo».

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Biblia Católica (Latinoamericana)

Ahora yo voy a enviar sobre ustedes lo que mi Padre prometió. Permanezcan, pues, en la ciudad hasta que sean revestidos de la fuerza que viene de arriba.

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La Biblia Textual 3a Edicion

He aquí Yo envío la promesa de mi Padre° sobre vosotros, así que vosotros permaneced° en la ciudad° hasta que seáis investidos de poder desde lo alto.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

Y mirad: yo voy a enviar sobre vosotros lo prometido por mi Padre. Vosotros, pues, permaneced en la ciudad hasta que seáis revestidos de fuerza desde lo alto'.

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

Y he aquí, yo enviaré sobre vosotros la promesa de mi Padre: mas vosotros quedaos en la ciudad de Jerusalén hasta que seáis investidos con poder de lo alto.

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Lucas 24:49
12 Tagairtí Cros  

hasta que sea derramado sobre nosotros el Espíritu desde lo alto, y el desierto se convierta en campo fructífero, y el campo fructífero sea reputado como selva.


Mas el Consolador, es decir, el Espíritu Santo, a quien el Padre enviará en mi nombre, él os enseñará todas las cosas, y os recordará todo cuanto os he dicho.


Mas cuando viniere el Consolador, a quien yo os enviaré desde el Padre, es a saber, el Espíritu de verdad, que procede del Padre, él testificará de mí:


Y estando reunido con ellos, les mandó que no partiesen de Jerusalem, sino que esperasen allí  la promesa del Padre, la cual (así decía), habéis oído de mí.


mas recibiréis poder, cuando haya venido sobre vosotros el Espíritu Santo; y seréis mis testigos, así en Jerusalem como en toda la Judea y Samaria, y hasta los últimos confines de la tierra.


y llegando frente a Misia, procuraron entrar en Bitinia; y no se lo permitió el Espíritu de Jesús.