El trigo de pan se machaca con el trillo: empero no para siempre lo seguirá trillando; y aunque lo esparza con la rueda de su carro, sin embargo no lo machaca con sus corceles.
Lucas 22:31 - Biblia Version Moderna (1929) ¶Dijo además el Señor: Simón, Simón, he aquí que Satanás os ha pedido para zarandearos como a trigo. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Dijo también el Señor: Simón, Simón, he aquí Satanás os ha pedido para zarandearos como a trigo; Biblia Nueva Traducción Viviente »Simón, Simón, Satanás ha pedido zarandear a cada uno de ustedes como si fueran trigo; Biblia Católica (Latinoamericana) ¡Simón, Simón! Mira que Satanás ha pedido permiso para sacudirlos a ustedes como trigo que se limpia;' La Biblia Textual 3a Edicion °Simón, Simón, he aquí Satanás os reclamó° para zarandearos como a trigo. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Simón, Simón, mira que Satanás os ha reclamado para cribaros como al trigo; Biblia Reina Valera Gómez (2023) Dijo también el Señor: Simón, Simón, he aquí Satanás os ha pedido para zarandearos como a trigo; |
El trigo de pan se machaca con el trillo: empero no para siempre lo seguirá trillando; y aunque lo esparza con la rueda de su carro, sin embargo no lo machaca con sus corceles.
Pues he aquí que voy a mandar, y haré zarandear entre todas las naciones a la casa de Israel, como se zarandea el trigo en un harnero; mas no caerá a tierra ni un solo granito.
Y ME mostró a Josué, sumo sacerdote, que estaba en pie delante del ángel de Jehová, y a Satanás que estaba a su mano derecha para acusarle.
Jesús entonces le dice: ¡Apártate, Satanás! porque escrito está: Al Señor tu Dios adorarás, y a él solamente servirás.
Pero Jesús respondiendo, le dijo: ¡Marta, Marta, cuidadosa estás, y te dejas turbar en cuanto a muchas cosas;
y caído a tierra, oyó una voz que le decía: ¡Saulo! ¡Saulo! ¿por qué me persigues?
que el tal sea entregado a Satanás, para destrucción de la carne, para que el espíritu sea salvado en el día del Señor Jesús.
a fin de que Satanás no gane ventaja alguna sobre nosotros; porque no estamos ignorantes de sus ardides.
Sed sobrios, sed vigilantes; vuestro adversario el diablo, como león rugiente, anda en derredor, buscando a quien devorar:
¶Y oí una gran voz en el cielo, que decía: ¡Ahora han venido la salvación y el poder y el reino de nuestro Dios, y la soberanía de su Cristo; porque ha sido derribado el acusador de nuestros hermanos, que los acusaba delante de nuestro Dios día y noche!