Bíobla ar líne

Fógraí


An Bíobla ar fad Sean-Tiomna Tiomna Nua




Lucas 21:28 - Biblia Version Moderna (1929)

Mas en comenzando a suceder estas cosas, erguíos y alzad vuestras cabezas; porque vuestra redención se va acercando.

Féach an chaibidil
Taispeáin Interlinear Bible

Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

Cuando estas cosas comiencen a suceder, erguíos y levantad vuestra cabeza, porque vuestra redención está cerca.

Féach an chaibidil

Biblia Nueva Traducción Viviente

Por lo tanto, cuando todas estas cosas comiencen a suceder, pónganse de pie y levanten la mirada, ¡porque la salvación está cerca!

Féach an chaibidil

Biblia Católica (Latinoamericana)

Cuando se presenten los primeros signos, enderécense y levanten la cabeza, porque está cerca su liberación.

Féach an chaibidil

La Biblia Textual 3a Edicion

Cuando estas cosas comiencen a suceder, erguíos y levantad vuestras cabezas, porque vuestra redención está cerca.

Féach an chaibidil

Biblia Serafín de Ausejo 1975

Cuando comience a suceder todo esto, tened ánimo y levantad la cabeza, porque vuestra liberación se acerca'.

Féach an chaibidil

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

Y cuando estas cosas comiencen a suceder, erguíos y levantad vuestras cabezas, porque vuestra redención está cerca.

Féach an chaibidil
Aistriúcháin eile



Lucas 21:28
11 Tagairtí Cros  

¶Y he aquí una mujer que tenía un espíritu de enfermedad ya por diez y ocho años, y estaba agobiada, y no podía en manera alguna enderezarse.


¿Y acaso Dios no defenderá la causa de sus escogidos, que claman a él día y noche, aunque dilate largo tiempo acerca de ellos?


¶Y les dijo una parábola: Mirad la higuera y todos los árboles.


Porque la ardiente expectación de la creación aguarda la manifestación de los hijos de Dios.


Y no tan sólo así, sino que nosotros también, que tenemos las primicias del Espíritu, sí, nosotros mismos gemimos dentro de nosotros, aguardando la adopción, es decir, la redención de nuestro cuerpo.


el cual es las arras de nuestra herencia, hasta la redención de la posesión adquirida, para loor de su gloria.


Y no contristéis al Espíritu Santo de Dios, con en cual sois sellados para el día de la redención.