Entonces el que había recibido los cinco talentos, fué y negoció con ellos, y ganó otros cinco talentos.
Lucas 19:13 - Biblia Version Moderna (1929) Y habiendo llamado diez siervos de los suyos, les dió diez minas, y les dijo: Negociad con esto hasta que yo venga. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Y llamando a diez siervos suyos, les dio diez minas, y les dijo: Negociad entre tanto que vengo. Biblia Nueva Traducción Viviente Antes de partir, reunió a diez de sus siervos y dividió entre ellos cinco kilos de plata, diciéndoles: “Inviertan esto por mí mientras estoy de viaje”; Biblia Católica (Latinoamericana) Llamó a diez de sus servidores, les entregó una moneda de oro a cada uno y les dijo: 'Comercien con ese dinero hasta que vuelva. La Biblia Textual 3a Edicion Y llamando a diez de sus siervos, les dio diez minas,° y les dijo: Negociad mientras vengo. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Llamó a diez criados suyos, les dio diez minas y les dijo: 'Negociad hasta que yo vuelva'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y llamando a diez siervos suyos, les dio diez minas, y les dijo: Negociad entre tanto que vengo. |
Entonces el que había recibido los cinco talentos, fué y negoció con ellos, y ganó otros cinco talentos.
Presentándose, pues, el que había recibido los cinco talentos, trajo otros cinco talentos, diciendo: Señor, cinco talentos me entregaste; he aquí, he ganado, además de ellos, otros cinco talentos.
También el que había recibido los dos talentos, presentóse, y dijo: Señor, dos talentos me entregaste; he aquí, he ganado, además de ellos, otros dos talentos.
Pero llegándose también el que había recibido un solo talento, dijo: Señor, yo te conocía que eres hombre exigente, que siegas donde no sembraste, y recoges donde no esparciste;
Dijo pues: Cierto hombre de ilustre nacimiento partió para un país lejano, a recibir para sí un reino, y volver.
Sus conciudadanos empero le odiaban: y enviaron tras él una embajada, diciendo: No queremos que éste reine sobre nosotros.
Si alguno me sirve, sígame; y en donde yo estoy, allí también estará mi servidor: si alguno me sirviere, a éste le honrará mi Padre.
Porque ¿estoy yo conciliando ahora a los hombres, o a Dios? o, ¿estoy procurando agradar a los hombres? Si todavía yo procurara agradar a los hombres, no sería siervo de Cristo.
SANTIAGO, siervo de Dios y del Señor Jesucristo, a las doce tribus que están en la dispersión: Salud.
SIMÓN Pedro, siervo y apóstol de Jesucristo, a los que juntamente con nosotros han recibido igualmente preciosa fe, en virtud de la justicia de nuestro Dios y Salvador, Jesucristo: