Bíobla ar líne

Fógraí


An Bíobla ar fad Sean-Tiomna Tiomna Nua




Levítico 22:8 - Biblia Version Moderna (1929)

Cosa mortecina, o despedazada por fieras, no ha de comer, contaminándose con ella. Yo Jehová.

Féach an chaibidil
Taispeáin Interlinear Bible

Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

Mortecino ni despedazado por fiera no comerá, contaminándose en ello. Yo Jehová.

Féach an chaibidil

Biblia Nueva Traducción Viviente

No se le permite comer un animal que haya muerto de muerte natural o haya sido despedazado por los animales salvajes, porque esto lo contaminará. Yo soy el Señor.

Féach an chaibidil

Biblia Católica (Latinoamericana)

No comerán animal muerto o destrozado, pues con él se harían impuros: ¡Yo soy Yavé!

Féach an chaibidil

La Biblia Textual 3a Edicion

No comerá nada mortecino ni despedazado por fiera, porque será contaminado con ellos. Yo, YHVH.

Féach an chaibidil

Biblia Serafín de Ausejo 1975

No comerá carne de animal muerto o despedazado, pues se contaminaría con ella. Yo, Yahveh.

Féach an chaibidil

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

Mortecino ni despedazado por fiera no comerá, contaminándose en ello: Yo soy Jehová.

Féach an chaibidil
Aistriúcháin eile



Levítico 22:8
8 Tagairtí Cros  

De igual manera harás con tus vacadas y con tus rebaños. Siete días estará la cría con su madre, mas al octavo día me la darás.


¶Y habéis de serme hombres santos: por lo mismo no comeréis la carne destrozada por las fieras en el campo; a los perros la echaréis.


¶Entonces yo dije: ¡Ah Jehová, Señor! ¡he aquí que mi alma nunca ha sido contaminada, ni he comido cosa mortecina, ni destrozada por fieras desde mi mocedad hasta ahora; ni carne abominable jamás ha entrado en mi boca!


Ninguna cosa mortecina, ni destrozada por fieras, ora sea de aves, ora de bestias, podrán los sacerdotes comer.


¶También todo aquel que comiere cosa mortecina, o despedazada por fieras, sea de los de vuestra nación o de los extranjeros, lavará sus vestidos, y a sí mismo se lavará con agua, y quedará inmundo hasta la tarde; después estará limpio.


Si bien el sebo de animal mortecino, o del desgarrado por fieras, podrá servir para cualquier oficio, pero de ninguna manera lo habéis de comer.


No comeréis ninguna cosa mortecina; al extranjero que habitare dentro de tus puertas la podréis dar, y él la comerá; o la podréis vender a uno de tierra extraña; porque eres tú un pueblo santo a Jehová tu Dios. No guisarás el cabrito en la leche de su misma madre.