¡DIOS mío, Dios mío! ¿por qué me has desamparado? ¿por qué estás tan lejos de ayudarme, y de escuchar las palabras de mi gemido?
Levítico 1:15 - Biblia Version Moderna (1929) y el sacerdote la traerá al altar; y de una uñada le cortará la cabeza, la cual hará consumir sobre el altar, después de exprimida la sangre sobre las paredes del altar. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Y el sacerdote la ofrecerá sobre el altar, y le quitará la cabeza, y hará que arda en el altar; y su sangre será exprimida sobre la pared del altar. Biblia Nueva Traducción Viviente El sacerdote llevará el ave al altar, le arrancará la cabeza y la quemará sobre el altar; pero primero deberá escurrir la sangre y dejarla correr sobre un costado del altar. Biblia Católica (Latinoamericana) El sacerdote presentará la víctima en el altar, le retorcerá la cabeza y la quemará sobre el altar; la sangre la exprimirá sobre la pared del altar. La Biblia Textual 3a Edicion El sacerdote la acercará al altar, y de una uñada° le cortará la cabeza, la cual dejará consumir sobre el altar. Después exprimirá su sangre sobre la pared del altar, Biblia Serafín de Ausejo 1975 El sacerdote llevará la víctima al altar, le retorcerá el cuello y le arrancará la cabeza, que quemará sobre el altar. Su sangre será exprimida sobre las paredes del altar. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y el sacerdote la ofrecerá sobre el altar, y le quitará la cabeza y la quemará sobre el altar; y su sangre será exprimida sobre la pared del altar. |
¡DIOS mío, Dios mío! ¿por qué me has desamparado? ¿por qué estás tan lejos de ayudarme, y de escuchar las palabras de mi gemido?
¡Sálvame de la boca del león! Y ya me has oído, clamando desde los cuernos de los uros.
Así pues Dios hace tornar a su pueblo aquí; y aguas amargas en abundancia son apuradas por ellos.
Esto no obstante, Jehová quiso quebrantarle; le ha afligido: cuando hiciere su vida ofrenda por el pecado, verá linaje, prolongará sus días, y el placer de Jehová prosperará en su mano.
Mas en cuanto a vosotros, la unción que dé él habéis recibido, permanece en vosotros, y no tenéis necesidad de que nadie os enseñe: al contrario, así como su unción os enseña respecto de todas las cosas, y es verdad y no mentira, y así como ella os ha enseñado, así vosotros permanecéis en él.
Y fué así; pues cuando se levantó al otro día, apretó el vellocino, y exprimió del vellocino el rocío, un tazón lleno de agua.