Bíobla ar líne

Fógraí


An Bíobla ar fad Sean-Tiomna Tiomna Nua




Jueces 9:46 - Biblia Version Moderna (1929)

¶Mas cuando todos los hombres de la torre de Siquem lo supieron, entraron en la fortaleza de la casa del dios Berit.

Féach an chaibidil
Taispeáin Interlinear Bible

Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

Cuando oyeron esto todos los que estaban en la torre de Siquem, se metieron en la fortaleza del templo del dios Berit.

Féach an chaibidil

Biblia Nueva Traducción Viviente

Cuando los ciudadanos prominentes que vivían en la torre de Siquem se enteraron de lo sucedido, corrieron a esconderse en el templo de Baal-berit.

Féach an chaibidil

Biblia Católica (Latinoamericana)

Al saber eso, toda la gente de la Torre de Siquem se refugiaron en la cripta del templo de El-Berit.

Féach an chaibidil

La Biblia Textual 3a Edicion

Al oírlo, todos los habitantes de la torre de Siquem se replegaron a la cripta del templo de ’El-Berit.°

Féach an chaibidil

Biblia Serafín de Ausejo 1975

Al enterarse de esto, todos los principales, que estaban en la torre de Siquén se metieron en la cripta del templo de El Berit.

Féach an chaibidil

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

Cuando oyeron esto todos los que estaban en la torre de Siquem, entraron en la fortaleza del templo del dios Berit.

Féach an chaibidil
Aistriúcháin eile



Jueces 9:46
10 Tagairtí Cros  

Ahora pues, oh Dios de Israel, sea estable, te lo ruego, tu palabra que hablaste a David mi padre.


Como ellos son los que los hacen, y todo aquel que confía en ellos.


Y aconteció que estando él adorando en la casa de Nisroc, dios suyo, Adramelec y Sarezer, sus mismos hijos, le hirieron a espada; y escaparon al país de Armenia: y reinó Esar-hadón, hijo suyo, en su lugar.


Y dijo Josué: Haced rodar grandes piedras a la boca de la cueva, y colocad hombres junto a ella, que guarden a los reyes;


¶Mas aconteció, luego que hubo muerto Gedeón, que tornaron los hijos de Israel y fornicaron tras los Baales; pues pusieron a Baal-berit por dios suyo;


y salieron a los campos, y vendimiaron sus viñas, y pisaron las uvas, e hicieron fiestas; y entraron en casa de su dios, comiendo, y bebiendo, y maldiciendo a Abimelec.


Y de la casa de Baal-berit le dieron setenta siclos de plata, con los cuales Abimelec tomó a sueldo hombres ociosos y disolutos; los cuales le siguieron.


Y fué dado aviso a Abimelec cómo se habían reunido allí todos los hombres de la torre de Siquem.