Josué 6:15 - Biblia Version Moderna (1929) Mas sucedió que el día séptimo madrugaron, al despuntar el alba, dieron la vuelta a la ciudad, de la misma manera, siete veces; sólo en aquel día dieron la vuelta a la ciudad siete veces. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Al séptimo día se levantaron al despuntar el alba, y dieron vuelta a la ciudad de la misma manera siete veces; solamente este día dieron vuelta alrededor de ella siete veces. Biblia Nueva Traducción Viviente El séptimo día, los israelitas se levantaron al amanecer y marcharon alrededor de la ciudad como lo habían hecho los días anteriores; pero esta vez, dieron siete vueltas alrededor de la ciudad. Biblia Católica (Latinoamericana) El séptimo día, cuando despuntaba el alba, se dieron siete vueltas alrededor de la ciudad. La Biblia Textual 3a Edicion El séptimo día se levantaron al rayar el alba, y rodearon la ciudad de la misma manera, siete veces. Sólo en aquel día rodearon la ciudad siete veces. Biblia Serafín de Ausejo 1975 El séptimo día, se levantaron al romper el alba y, siguiendo el mismo orden, dieron siete vueltas a la ciudad. Solamente aquel día dieron siete veces la vuelta a la ciudad. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y sucedió que en el séptimo día se levantaron temprano, al despuntar el alba, y dieron vuelta a la ciudad de la misma manera siete veces; solamente este día dieron vuelta alrededor de la ciudad siete veces. |
DESPUÉS del sábado, cuando iba amaneciendo el primer día de la semana, vinieron María Magdalena y la otra María a ver el sepulcro.
¶Por fe cayeron los muros de Jericó, después que se hubo dado vuelta alrededor de ellos siete días.
POR la mañana pues madrugó Josué, y levantando el campamento desde Sitim, vinieron al Jordán, él y todos los hijos de Israel; e hicieron estancia allí antes de pasar el río.
Asimismo dieron la vuelta a la ciudad el segundo día una sola vez, y se volvieron al campamento. De esta manera hicieron seis días.
Y aconteció que a la séptima vez tocaron los sacerdotes las trompetas, y dijo Josué al pueblo: ¡Gritad, pues Jehová os ha dado la ciudad!
Y también tenemos, más firme, la palabra profética; a la cual hacéis bien en estar atentos, como a una lámpara que luce en un lugar tenebroso, hasta que el día esclarezca, y el lucero nazca en vuestros corazones;