Por lo mismo, sucederá que cuando el Señor haya acabado de hacer toda su obra en el Monte de Sión y en Jerusalem, castigaré el fruto del orgulloso corazón del rey de Asiria, y la gloria de sus ojos altivos.
Jeremías 50:18 - Biblia Version Moderna (1929) Por tanto, así dice Jehová de los Ejércitos, el Dios de Israel: He aquí que yo castigaré al rey de Babilonia y a su tierra, así como he castigado al rey de Asiria. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Por tanto, así ha dicho Jehová de los ejércitos, Dios de Israel: Yo castigo al rey de Babilonia y a su tierra, como castigué al rey de Asiria. Biblia Nueva Traducción Viviente Por lo tanto, esto dice el Señor de los Ejércitos Celestiales, Dios de Israel: «Ahora, castigaré al rey de Babilonia y a su tierra de la misma manera que castigué al rey de Asiria. Biblia Católica (Latinoamericana) Por eso, así habla Yavé de los Ejércitos, el Dios de Israel: Estoy listo para castigar al rey de Babilonia y a su país, como ya castigué al rey de Asur. La Biblia Textual 3a Edicion Por tanto, así dice YHVH Sebaot, Dios de Israel: He aquí Yo castigo al rey de Babilonia y a su tierra, como castigué al rey de Asiria. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Por eso, así dice Yahveh Sebaot, Dios de Israel: 'Mirad: voy a castigar al rey de Babel y a su país como castigué al rey de Asiria. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Por tanto, así dice Jehová de los ejércitos, el Dios de Israel: He aquí que yo castigaré al rey de Babilonia y a su tierra como castigué al rey de Asiria. |
Por lo mismo, sucederá que cuando el Señor haya acabado de hacer toda su obra en el Monte de Sión y en Jerusalem, castigaré el fruto del orgulloso corazón del rey de Asiria, y la gloria de sus ojos altivos.
Todas las naciones, pues, le han de servir a él, y a su hijo, y al hijo de su hijo, hasta que llegue el tiempo de su tierra también; entonces a ella la reducirán a servidumbre muchas naciones y grandes reyes.
Porque día es éste de Jehová de los Ejércitos, el Señor, su día de venganza, en que se vengue de sus adversarios: por tanto devorará la espada, y se saciará, y se embriagará con la sangre de ellos: porque Jehová de los Ejércitos, el Señor, tiene un gran sacrificio en la tierra del Norte, junto al río Eufrates.
¡Duérmense tus pastores, oh rey de Asiria; habitarán en el polvo tus ilustres guerreros; anda tu pueblo disperso sobre las montañas, y no hay quién los recoja!
Y sucederá que cuantos te miraren, huirán de ti, diciendo: ¡Nínive está asolada! ¿quién se compadecerá de ella? ¿en dónde buscaré consoladores para ti?
Por cuanto tú has saqueado a muchas naciones, todo el residuo de los pueblos te saquearán a ti; a causa de la derramada sangre humana, y de la violencia hecha a la tierra, a la ciudad, y a los que habitan en ella.
Cuando afilare mi luciente espada, y mi mano empuñare el juicio, retribuiré la venganza a mis adversarios, y a los que me odian daré la recompensa.