Y desecharé los restos de mi herencia, y los entregaré en mano de sus enemigos; y serán presa y despojo para todos sus enemigos:
Jeremías 44:27 - Biblia Version Moderna (1929) He aquí que yo, vigilo sobre ellos para mal y no para bien; y todos los hombres dé Judá que están en la tierra de Egipto, serán consumidos a espada y de hambre, hasta concluir con ellos. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 He aquí que yo velo sobre ellos para mal, y no para bien; y todos los hombres de Judá que están en tierra de Egipto serán consumidos a espada y de hambre, hasta que perezcan del todo. Biblia Nueva Traducción Viviente Pues los vigilaré para traerles desastre y no bien. Todos los de Judá que ahora viven en Egipto sufrirán guerra y hambre hasta que todos mueran. Biblia Católica (Latinoamericana) Sí, voy a poner mis ojos sobre ellos, no para su bien sino para su mal. Todos los hombres de Judá que están ahora en Egipto, perecerán a espada y de hambre hasta que se terminen todos. La Biblia Textual 3a Edicion He aquí Yo vigilo sobre ellos para mal y no para bien; y todos los hombres de Judá que están en tierra de Egipto serán consumidos por la espada y por el hambre, hasta que perezcan del todo. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Mirad: voy a velar por ellos para desgracia y no para felicidad, pues todos los hombres de Judá que están en el país de Egipto serán consumidos por la espada y por el hambre hasta su aniquilamiento. Biblia Reina Valera Gómez (2023) He aquí que yo velo sobre ellos para mal, y no para bien; y todos los hombres de Judá que están en la tierra de Egipto, serán consumidos a espada y de hambre, hasta que perezcan del todo. |
Y desecharé los restos de mi herencia, y los entregaré en mano de sus enemigos; y serán presa y despojo para todos sus enemigos:
Mira que yo te pongo hoy sobre las naciones y sobre los reinos, para desarraigar, y para derribar, y para arruinar, y para destruir completamente; para edificar también y para plantar.
Porque he puesto mi rostro hacia esta ciudad para mal y no para bien, dice Jehová: será entregada en mano del rey de Babilonia, el cual la quemará a fuego.
Y sucederá que de la manera que yo velaba sobre ellos para arrancar, y para dispersar, y para derribar, y para destruir, y para afligir, así velaré sobre ellos para edificar y para plantar, dice Jehová.
Anda, y habla con Ebed-melec etíope, diciendo: Así dice Jehová de los Ejércitos, el Dios de Israel: He aquí que voy a dar efecto a mis palabras acerca de esta ciudad, para mal y no para bien; y se cumplirán en aquel día a presencia tuya.
entonces sucederá que la espada que teméis os alcanzará allí en Egipto, y el hambre de que os receláis os perseguirá allí en Egipto, y allí moriréis.
Y tomaré el resto de Judá, los que fijaron su rostro resueltamente para entrar en la tierra de Egipto a habitar temporalmente allí, y haré que sean todos consumidos, y que caigan en la tierra de Egipto; a espada y de hambre serán consumidos; desde el menor hasta el mayor morirán a espada y de hambre; y vendrán a ser una execración, y un asombro, y una maldición, y un oprobio.
Porque castigaré a los Judíos que moran en la tierra de Egipto, así como he castigado a Jerusalem con la espada y con el hambre y con la peste;
de modo que del resto de Judá que ha venido a la tierra de Egipto para habitar temporalmente allí, no habrá quien escape o se quede para volver a la tierra de Judá, adonde desean ardientemente volver para morar allí: porque no tornarán allá sino algunos pocos fugitivos.
Pero desde que hemos dejado de quemar incienso a la reina del cielo y de derramar libaciones a ella, nos ha faltado todo, y hemos sido consumidos por la espada y el hambre.
por tanto, así dice Jehová del los Ejércitos; el Dios de Israel: He aquí que a este pueblo yo le daré a comer ajenjo, y haré que beban aguas de hiel.
Y los esparciré entre las naciones, que ni ellos ni sus padres han conocido; y enviaré en pos de ellos la espada, hasta que yo los haya consumido.
Una tercera parte de ti morirá de peste, y será consumida de hambre en medio de ti; y otra tercera parte caerá a espada en derredor de ti; y otra tercera parte la esparciré a todos los vientos, y sacaré la espada en pos de ellos.
¡El fin viene, viene el fin! ¡hase despertado contra ti; he aquí que viene!
Por lo cual veló Jehová sobre el mal, y lo ha traído sobre nosotros; porque justo es Jehová nuestro Dios en todas sus obras que ha hecho, y nosotros no hemos obedecido su voz.
He aquí que los ojos de Jehová el Señor están sobre el reino pecador; y lo voy a destruir de sobre la faz de la tierra, sólo que no destruiré por completo a la casa de Jacob, dice Jehová.