Entonces ella dijo a Elías: ¿Qué tengo yo que ver contigo, oh varón de Dios? ¿has venido a mí para renovar la memoria de mi pecado, y para hacer morir a mi hijo?
Jeremías 44:21 - Biblia Version Moderna (1929) ¿Por ventura no se acordó Jehová del incienso que quemasteis en las ciudades de Judá y en las calles de Jerusalem; vosotros y vuestros padres, vuestros reyes y vuestros príncipes y el pueblo de la tierra; y acaso no se le dió nada de ello? Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 ¿No se ha acordado Jehová, y no ha venido a su memoria el incienso que ofrecisteis en las ciudades de Judá, y en las calles de Jerusalén, vosotros y vuestros padres, vuestros reyes y vuestros príncipes y el pueblo de la tierra? Biblia Nueva Traducción Viviente —¿Acaso piensan que el Señor no sabía que ustedes y sus antepasados, sus reyes y funcionarios y todo el pueblo quemaban incienso a los ídolos en las ciudades de Judá y en las calles de Jerusalén? Biblia Católica (Latinoamericana) ¿No ha sido, justamente, ese incienso que ustedes han ofrecido en las ciudades de Judá y en los barrios de Jerusalén, junto con sus padres, reyes y príncipes, lo que ha recordado Yavé y lo que le ha hecho palpitar el corazón? La Biblia Textual 3a Edicion ¿Acaso ha pasado desapercibido ante YHVH, y no está en su memoria el incienso ofrecido por vosotros y vuestros padres, por vuestros reyes y vuestros príncipes y por el pueblo de la tierra en las ciudades de Judá, y en las calles de Jerusalem? Biblia Serafín de Ausejo 1975 'El incienso que habéis quemado en las ciudades de Judá y en las calles de Jerusalén, vosotros y vuestros padres, vuestros reyes y vuestros príncipes y la población del país, ¿no lo ha recordado Yahveh y no ha pensado en ello? Biblia Reina Valera Gómez (2023) ¿No se ha acordado Jehová, y no ha venido a su memoria el incienso que ofrecisteis en las ciudades de Judá, y en las plazas de Jerusalén, vosotros y vuestros padres, vuestros reyes y vuestros príncipes, y el pueblo de la tierra? |
Entonces ella dijo a Elías: ¿Qué tengo yo que ver contigo, oh varón de Dios? ¿has venido a mí para renovar la memoria de mi pecado, y para hacer morir a mi hijo?
¡No tengas en memoria contra nosotros las iniquidades pasadas! ¡apresúrate! ¡vengan tus misericordias a encontrarnos; porque estamos muy abatidos!
¡No te enojes, oh Jehová, hasta el extremo, ni te acuerdes para siempre de la iniquidad! ¡he aquí, mira, te rogamos, que todos nosotros somos pueblo tuyo!
Porque conforme al número de tus ciudades son tus dioses, oh Judá; y conforme al número de las calles de Jerusalem, a habéis erigido altares a aquella cosa vergonzosa; altares para quemar incienso a Baal.
Así dice Jehová respecto de este pueblo: De esta manera les gusta andar vagando; no han refrenado sus pies; por tanto Jehová no se complace en ellos: ahora traerá a memoria sus iniquidades, y castigará sus pecados.
a causa de toda la maldad de los hijos de Israel y de los hijos de Judá, la que ellos han hecho para provocarme a ira; ellos, sus reyes, sus príncipes, sus sacerdotes, y sus profetas y los hombres de Judá y los habitantes de Jerusalem.
al contrario cumpliremos resueltamente toda promesa que ha salido de nuestra boca, respecto de quemar incienso a la reina del cielo, y de derramar libaciones a ella; como hicimos nosotros y nuestros padres, nuestros reyes y nuestros príncipes, en las ciudades de Judá y en las calles de Jerusalem; con lo cual tuvimos abundancia de pan, y éramos felices, y no vimos calamidad.
¶Entonces Jeremías respondió a todo el pueblo, es decir, a los hombres y a las mujeres, y en fin, a todo el pueblo, los cuales le habían dado aquella respuesta, diciendo:
¿Acaso habéis olvidado las maldades de vuestros padres, y las maldades de los reyes de Judá, y las maldades de sus mujeres, y vuestras propias maldades, y las maldades de vuestras mujeres, que han sido cometidas en la tierra de Judá, y por las calles de Jerusalem?
Y ellos no consideran en su corazón que yo me acuerdo de todas sus maldades: ahora sus obras detestables los tienen cercados; delante de mi vista están.
Ha jurado Jehová por la excelencia de Jacob, diciendo: Ciertamente que yo nunca me olvidaré de ninguna de sus obras.
Y Jehová lo vió, y los trató con desprecio, porque le habían provocado sus hijos y sus hijas.
Y la gran ciudad fué dividida en tres partes, y las ciudades de las naciones cayeron: y la gran Babilonia vino en memoria delante de Dios, para que se le diese el cáliz del vino de su ira.
porque sus pecados han alcanzado hasta el cielo, y Dios se ha acordado de sus iniquidades
Ahora pues, anda y hiere a Amalec; y destruíd completamente todo lo suyo, sin tenerle compasión alguna; antes harás morir hombres y mujeres, niños y mamantes, vacas y ovejas, camellos y asnos.