Jeremías 36:5 - Biblia Version Moderna (1929) Luego mandó Jeremías a Baruc, diciendo: Yo estoy encerrado; no puedo entrar en la Casa de Jehová; Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Después mandó Jeremías a Baruc, diciendo: A mí se me ha prohibido entrar en la casa de Jehová. Biblia Nueva Traducción Viviente Entonces Jeremías le dijo a Baruc: «Estoy preso aquí y no puedo ir al templo. Biblia Católica (Latinoamericana) Jeremías mandó decirle a Baruc: 'Estoy detenido y no puedo ir a la Casa de Yavé, La Biblia Textual 3a Edicion Después Jeremías mandó a Baruc, diciendo: A mí se me ha prohibido entrar en la Casa de YHVH. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Después Jeremías dio a Baruc esta orden: 'Yo estoy arrestado, no puedo ir al templo de Yahveh. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Después mandó Jeremías a Baruc, diciendo: Yo estoy preso, no puedo entrar en la casa de Jehová: |
¶Entonces fui a la casa de Semaya hijo de Delaya, hijo de Mehetabel, el cual se había encerrado; y él me dijo: ¡Reunámonos en la Casa de Dios, en lo más adentro del Templo, y cerraremos las puertas del Templo; porque vienen a matarte! ¡sí, de noche vienen a matarte!
Has alejado de mí mis conocidos; me has hecho una abominación para ellos; estoy encerrado, y no puedo salir.
Entonces Pasur hirió al profeta Jeremías, y le puso en el cepo que había en la puerta superior de Benjamín, que estaba en la Casa de Jehová.
y dí la escritura de propiedad a Baruc hijo de Nería, hijo de Mahseya, en presencia de Hanamel, hijo de mi tío, y en presencia de los testigos que subscribieron la escritura de propiedad y en presencia de los judíos que estaban sentados en el patio de la cárcel.
Es de saber que a la sazón el ejército del rey de Babilonia tenía sitiada a Jerusalem, y el profeta Jeremías estaba encerrado en el patio de la cárcel que había en la casa del rey de Judá.
Y ESTANDO Jeremías todavía preso en el patio de la cárcel, tuvo segunda vez revelación de Jehová, que decía:
Y los príncipes estallaron en ira contra Jeremías, y le azotaron, y le pusieron en la cárcel, en la casa de Jonatán secretario; porque a ésta la habían convertido en cárcel.
Jeremías pues permaneció en el patio de la cárcel hasta el día que fué tomada Jerusalem; y estaba aún allí cuando Jerusalem fué tomada.
Ellos pues tomaron a Jeremías y le echaron en la cisterna de Malquías, hijo de Hamelec, que había en el patio de la cárcel; y bajaron a Jeremías por medio de sogas: y en la cisterna no había agua, sino fango; y hundióse Jeremías en el fango.
Y ahora, he aquí que a ti te suelto hoy de las cadenas que están sobre tus manos. Si te parece bien ir conmigo a Babilonia, ven, y yo miraré por tu seguridad; mas si te parece mal ir conmigo a Babilonia, deja de hacerlo. Mira que toda la tierra está delante de ti: a dondequiera que te pareciere bueno y conveniente ir, véte allá.
¿Son ministros de Cristo? (Hablo como quien ha perdido el juicio). Yo soy más: en trabajos más abundante, en cárceles con más frecuencia, en azotes sobre medida, en muertes muchas veces.
POR esta causa, yo Pablo, preso como soy de Cristo Jesús, a causa de vosotros gentiles—
a causa del cual soy un embajador en prisiones; para que en ello yo hable denodadamente, así como debo hablar.
en el cual sufro trabajos, hasta verme como malhechor, entre prisiones; pero la palabra de Dios no está aprisionada.
y otros tuvieron prueba de escarnios y azotes, y también de prisiones y cárceles: