Empero la muchedumbre de tus enemigos será como el menudo polvo, y como el tamo volante, la multitud de los terribles: y esto sucederá en un momento, repentinamente.
Isaías 48:3 - Biblia Version Moderna (1929) Las cosas pasadas yo las anuncié desde la antigüedad; sí de mi boca salieron, y yo las hice conocer; repentinamente las efectué, y han acontecido. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Lo que pasó, ya antes lo dije, y de mi boca salió; lo publiqué, lo hice pronto, y fue realidad. Biblia Nueva Traducción Viviente Hace mucho tiempo te dije lo que iba a suceder. Entonces, de repente entré en acción y todas mis predicciones se hicieron realidad. Biblia Católica (Latinoamericana) Yo les había anunciado los acontecimientos mucho tiempo antes. Salieron de mi boca cuando los di a conocer, de pronto actué y se cumplieron. La Biblia Textual 3a Edicion Las cosas primeras anuncié con anticipación; Sí, de mi boca salieron: Yo las hice conocer; De repente actué, y han acontecido. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Anuncié, con tiempo, las cosas pasadas de mi boca salieron y las declaré, de repente actué y acontecieron. Biblia Reina Valera Gómez (2023) He declarado las cosas primeras desde el principio; salieron de mi boca, y las mostré; las hice de repente, y se cumplieron. |
Empero la muchedumbre de tus enemigos será como el menudo polvo, y como el tamo volante, la multitud de los terribles: y esto sucederá en un momento, repentinamente.
por tanto esta iniquidad os será como rotura que amenaza ruina, extendiéndose en una pared elevada, cuya caída viene de repente, en un momento.
A causa de tu rabia contra mí, y por cuanto tu soberbia ha subido y entrado en mis oídos, yo pondré mi garfio en tu nariz, y mi freno en tus labios, y te haré volver por el camino por donde viniste.
He aquí que yo pondré otro espíritu en él; y oirá un rumor, y se volverá a su tierra; y le haré caer a espada en su misma tierra.
Saquen a luz y nos declaren lo que ha de suceder: declarad las predicciones anteriores, sean cuales fueren, para que las consideremos, y sepamos en qué pararon; o, que nos hagan oír las cosas por venir.
Yo dije el primero a Sión: ¡He aquí mis profetas; he ahí están! y daré a Jerusalem anunciador de buenas nuevas.
He aquí, las predicciones anteriores suceden ya, y cosas nuevas anuncio yo: antes que salgan a luz, os las hago saber.
¡Todas las naciones júntense a una, y congréguense los pueblos! ¿quién entre ellos anunciará esto, y nos hará oír las cosas anteriores? produzcan sus testigos para que sean justificados; o escuchen a mis testigos, y digan: Es verdad.
¡Pregonad, y hacedlos acercarse! sí, consulten ellos juntos. ¿Quién ha hecho saber esto desde la antigüedad? ¿quién desde remotos tiempos lo ha declarado? ¿Acaso no fuí yo, Jehová? y fuera de mí no hay Dios alguno. Dios justo y Salvador, no hay ninguno sino yo solo.
No faltó ni una palabra siquiera de toda aquella buena promesa que había hecho Jehová a la casa de Israel; todo sucedió.