Cada día me afrentan mis enemigos; y mis enfurecidos adversarios juran por mí.
Hechos 26:11 - Biblia Version Moderna (1929) Y castigándolos muchas veces, por todas las sinagogas, les hacía fuerza para que blasfemasen; y estando sobremanera enfurecido contra ellos, iba en persecución de ellos hasta las ciudades extranjeras. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Y muchas veces, castigándolos en todas las sinagogas, los forcé a blasfemar; y enfurecido sobremanera contra ellos, los perseguí hasta en las ciudades extranjeras. Biblia Nueva Traducción Viviente Muchas veces hice que los castigaran en las sinagogas para que maldijeran a Jesús. Estaba tan violentamente en contra de ellos que los perseguí hasta en ciudades extranjeras. Biblia Católica (Latinoamericana) Recorría las sinagogas y multiplicaba los castigos para obligarlos a renegar de su fe, y tal era mi furor contra ellos, que los perseguía hasta fuera de nuestras fronteras. La Biblia Textual 3a Edicion Y muchas veces, castigándolos por todas las sinagogas, los forzaba a blasfemar, y locamente enfurecido° contra ellos, los perseguía aun hasta en las ciudades extranjeras.° Biblia Serafín de Ausejo 1975 Y por todas las sinagogas, muchas veces a fuerza de golpes, procuré hacerles renegar y, lleno de saña hasta el extremo, los perseguía incluso en las ciudades extranjeras. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y muchas veces, castigándolos por todas las sinagogas, los forcé a blasfemar; y enfurecido sobremanera contra ellos, los perseguí hasta en las ciudades extranjeras. |
Cada día me afrentan mis enemigos; y mis enfurecidos adversarios juran por mí.
Esto es un grave mal entre todo lo que acaece debajo del sol, que un mismo acontecimiento suceda a todos; y además, el corazón de los hijos de los hombres está lleno de maldad, y la locura está en su corazón durante toda su vida, y después de esto se van a los muertos.
Y guardaos de los hombres; porque os entregarán a los concilios, y en sus sinagogas os azotarán;
Mirad empero por vosotros mismos; porque os entregarán a los concilios, y en las sinagogas seréis azotados; y seréis presentados ante gobernadores y reyes, por mi causa, para testimonio a ellos.
En verdad os digo que todo género de pecados será perdonado a los hijos de los hombres, y las blasfemias cualesquiera con que blasfemaren:
Mas cuando volvió en sí, dijo: ¡Cuántos jornaleros de mi padre tienen sobreabundancia de pan, y yo aquí perezco de hambre!
Pero antes de todas estas cosas, os echarán mano, y os perseguirán, entregándoos a las sinagogas; y metiéndoos en las cárceles; y seréis llevados ante reyes y gobernadores, por causa de mi nombre.
Mas ellos se llenaron de rabia, y conferenciaban entre sí de lo que pudieran hacer a Jesús.
Mas viendo los judíos las multitudes, se llenaron de celos, y contradecían las cosas dichas por Pablo, y blasfemaban.
Y cuando éstos se opusieron, y blasfemaron, sacudiendo sus vestidos, les dijo: ¡Recaiga vuestra sangre sobre vuestra misma cabeza; yo estoy limpio! ¡desde ahora me voy a los gentiles!
Y dije yo: Señor, ellos mismos saben que yo echaba en la cárcel, y azotaba de sinagoga en sinagoga, a los que creían en ti;
Como también el sumo sacerdote me da testimonio, y todo el cuerpo de los ancianos, de los cuales también recibí cartas para los hermanos, y emprendí marcha para Damasco, a fin de traer a los que allí se hallaren, en prisiones a Jerusalem, para ser castigados.
MAS Saulo, respirando todavía amenazas y muerte contra los discípulos del Señor, fué al sumo sacerdote,
¿No blasfeman ellos aquel nombre honorable del cual vosotros sois llamados?
mas fué reprendido por su transgresión; un mudo jumento, hablando con voz humana, refrenó la locura del profeta.