Porque el inicuo se jacta del deseo de su alma, y despojando al pobre, renuncia y desprecia a Jehová.
Hechos 24:2 - Biblia Version Moderna (1929) Y habiendo sido llamado éste, comenzó Tértulo a acusarle, diciendo: ¶Ya que por tu medio disfrutamos de mucha paz, y que reformas son efectuadas para esta nación por tú precisión, Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Y cuando este fue llamado, Tértulo comenzó a acusarle, diciendo: Como debido a ti gozamos de gran paz, y muchas cosas son bien gobernadas en el pueblo por tu prudencia, Biblia Nueva Traducción Viviente Una vez que hicieron entrar a Pablo, Tértulo presentó los cargos en su contra ante el gobernador con el siguiente discurso: «Usted ha dado un largo período de paz a nosotros, los judíos y, con previsión, nos ha promulgado reformas. Biblia Católica (Latinoamericana) Fue llamado Pablo, y Tértulo empezó su acusación: La Biblia Textual 3a Edicion Cuando él compareció,° Tértulo comenzó su acusación, diciendo: Como estamos disfrutando de mucha paz gracias a ti, y debido a tu providencia se están haciendo reformas para esta nación, Biblia Serafín de Ausejo 1975 Citado [éste] a juicio, comenzó Tértulo su acusación diciendo: 'La gran paz de que disfrutamos, gracias a ti, y las mejoras hechas a esta nación por tu providencia, Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y cuando este fue llamado, Tértulo comenzó a acusarle, diciendo: Debido a ti gozamos de gran quietud, y muchas cosas son bien gobernadas en la nación por tu providencia; |
Porque el inicuo se jacta del deseo de su alma, y despojando al pobre, renuncia y desprecia a Jehová.
La lengua mentirosa aborrece a los que son heridos por ella; y la boca aduladora obra la ruina.
Y DESPUÉS de cinco días, descendió el sumo sacerdote Ananías con ciertos ancianos, y un orador, un tal Tértulo; los cuales comparecieron ante el gobernador contra Pablo.
lo aceptamos a todo tiempo y en todo lugar, oh excelentísimo Félix, con todo agradecimiento.
Éstos son murmuradores, quejumbrosos, que andan en pos de sus concupiscencias, y su boca profiere palabras hinchadas, teniendo en admiración las personas de los hombres, por motivos de interés.