Entonces miré, y he aquí una mano extendida hacia mí; y he aquí en ella el rollo de un libro.
Hechos 11:5 - Biblia Version Moderna (1929) Estaba yo en la ciudad de Joppe orando; y ví en éxtasis una visión, a saber, que descendía cierto receptáculo, como si fuese un gran lienzo, descolgado del cielo por las cuatro puntas; y vino hasta mí. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Estaba yo en la ciudad de Jope orando, y vi en éxtasis una visión; algo semejante a un gran lienzo que descendía, que por las cuatro puntas era bajado del cielo y venía hasta mí. Biblia Nueva Traducción Viviente —Yo estaba en la ciudad de Jope —les dijo—, y mientras oraba, caí en un estado de éxtasis y tuve una visión. Algo parecido a una sábana grande descendía por sus cuatro puntas desde el cielo y bajó justo hasta donde yo estaba. Biblia Católica (Latinoamericana) Estaba yo haciendo oración en la ciudad de Jope cuando en un éxtasis tuve una visión. Algo bajaba del cielo, algo que se parecía a una gran tienda de campaña, y llegaba hasta mí, posándose en el suelo sobre sus cuatro puntas. La Biblia Textual 3a Edicion Estaba yo en la ciudad de Jope orando, y vi en éxtasis una visión: un objeto, algo como un gran lienzo que descendía descolgado del cielo por las cuatro puntas, y vino hasta mí. Biblia Serafín de Ausejo 1975 'Yo estaba orando en la ciudad de Jope, cuando vi en éxtasis una visión: una especie de recipiente a modo de un mantel grande que descendía, bajado del cielo por sus cuatro puntas, y que llegaba hasta mí. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Estaba yo en la ciudad de Jope orando, y vi en éxtasis una visión; un vaso, como un gran lienzo, que descendía, que por los cuatro cabos era bajado del cielo, y venía hasta mí. |
Entonces miré, y he aquí una mano extendida hacia mí; y he aquí en ella el rollo de un libro.
Y él me dijo: ¿Qué es lo que ves, Amós? Y respondí: Un canasto de frutas de verano. Entonces Jehová me dijo: Ha llegado el fin de mi pueblo Israel; ya no le pasaré más por alto.
¶Y sucedió que, habiendo yo vuelto a Jerusalem, y estando orando en el Templo, me sobrevino un éxtasis.
¶Mas había cierto discípulo en Damasco, llamado Ananías; y a éste le dijo el Señor en visión: Ananías. Y él dijo: Heme aquí, Señor.
¶Había también en Joppe cierta discípula llamada Tabita; nombre que, traducido al griego, se dice Dorcas: esta mujer era llena de buenas obras y de limosnas que hacía.
Y como Lidda estaba cerca de Joppe, los discípulos, oyendo que Pedro estaba allí, le enviaron dos hombres, a suplicarle, diciendo: No te tardes en venir a nosotros.
Y esto fué conocido por toda la ciudad de Joppe, y muchos creyeron en el Señor.